OTTAWA, 8 feb (Xinhua) -- El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, dijo hoy en Ottawa que su país pondrá fin a los ataques aéreos contra el grupo Estado Islámico (EI) en Siria e Irak para el 22 de febrero.
Trudeau también anunció que el gobierno ampliará los esfuerzos por entrenar a las fuerzas locales y reconstruir esta región devastada por la guerra.
Canadá triplicará el número de elementos del contingente de entrenamiento en Irak de los actuales 69 a 200 en los próximos dos años y el personal militar desplegado como parte de la fuerza especial conjunta para Irak aumentará de 650 a 850, dijo.
La decisión de retirar a los seis cazas CF-18 canadienses de la misión de bombardeo encabezada por Estados Unidos contra el EIIL se basó en el "deseo de hacer lo que Canadá puede hacer mejor" que es ayudar a las regiones afectadas, dijo Trudeau, usando un acrónimo alternativo del grupo extremista.
El anterior gobierno conservador comprometió a Canadá a los ataques aéreos de la coalición hasta marzo. El nuevo gobierno liberal fue elegido en octubre pasado con la promesa de retirar los seis cazas CF-18 del país de la misión de bombardeo.
"Es importante entender que aunque las operaciones de ataques aéreos pueden ser muy útiles para lograr objetivos militares y territoriales de corto plazo, por sí mismos no logran una estabilidad de largo plazo para las comunidades locales", dijo Trudeau.
Cuando se le preguntó si los entrenadores militares canadienses participarán en operaciones en la línea del frente o de combate junto con las fuerzas de seguridad locales, Trudeau respondió que "esta no es una misión de combate".
Por otra parte, Trudeau dijo que su gobierno aportará más de 1.600 millones de dólares canadienses (1.150 millones de dólares estadounidenses) en los próximos tres años al nuevo enfoque de seguridad, estabilización, asistencia humanitaria y desarrollo en respuesta a las crisis en Irak y Siria y su impacto sobre Jordania y Líbano.
Trudeau dijo que resolver la crisis en Irak y Siria requerirá "una solución política".
Trudeau ha estado sometido a presiones para mantener los cazas CF-18 en la misión de combate contra el EIIL en Irak y Siria, pero en repetidas ocasiones ha dicho que no dará marcha atrás a su promesa.
En una declaración emitida después del anuncio de Trudeau, la líder interina del Partido Conservador, Rona Ambrose, dijo que retirarse de la misión de combate es "un vergonzoso paso atrás" para Canadá y describió al EI como "la mayor amenaza terrorista del mundo que amenaza la seguridad de los canadienses".
El jefe de Estado Mayor de la Defensa de Canadá, Jonathan Vance, dijo que "este es precisamente el momento correcto" de retirar los cazas canadienses de la campaña de bombardeo.