LHASA, 25 ene (Xinhua) -- La región autónoma del Tíbet, en el suroeste de China, tiene una enorme tarea por delante para reducir en 690.000 el número de personas que viven por debajo del umbral de la pobreza para 2020, según las declaraciones de funcionarios en vísperas de la reunión anual de la Asamblea Popular Regional, el órgano legislativo local.
Durante el último lustro (2011-2015), el Tíbet logró que más de 600.000 personas saliesen de la pobreza, señaló Gou Ling, responsable del Partido Comunista de China de la oficina de reducción de la pobreza de la región autónoma del Tíbet, .
Sin embargo, el entorno de la meseta, propenso a desastres naturales, ha planteado un reto para el alivio de la pobreza, indicó Gou. La enfermedad también es un importante factor que frena el desarrollo.
Alrededor del 74 por ciento de la población empobrecida vive en las prefecturas de Xigaze, Qamdo y Nagqu, grandes franjas a través del oeste y el este de la región.
"La tarea en los próximos cinco años será la más ardua de todas", apuntó Gou.
El Tíbet planea centrarse en la política sobre el bienestar para los residentes pobres, la creación de puestos de trabajo y los planes de realojo.
