Por Matthew Rusling
WASHINGTON, 30 dic (Xinhua) -- El aspirante favorito a la candidatura republicana Donald Trump dijo esta semana que el ex presidente Bill Clinton es un objetivo justo, pero existen dudas sobre si esto podría perjudicar a su posible rival demócrata Hillary Clinton.
El altisonante multimillonario es bien conocido por decir todo lo que le viene a la mente y a menudo ha causado controversia por sus comentarios atroces, de los cuales se burlan sus críticos y los califican de aborrecibles.
Sin embargo, Trump mantiene hasta ahora una sólida ventaja frente a los demás candidatos republicanos en las encuestas.
Trump dijo esta semana que la esposa de Hillary, el ex presidente Bill Clinton es "juego limpio" y comentó que Bill Clinton tiene un pasado manchado por conducta sexual poco ética y por lo que Trump describió como "abuso de mujeres".
El magnate resaltó la aventura de Clinton con la ex becaria de la Casa Blanca Mónica Lewinski, un asunto que llegó a los encabezados mundiales.
La agresión de Trump se produce después de que Hillary Clinton indicó que utilizaría su "arma secreta" Bill Clinton para ayudarla a ocupar la Casa Blanca en 2016.
Trump respondió con un mensaje en la plataforma social Twitter que "si Hillary cree que puede liberar a su esposo, con su terrible registro de abuso de mujeres, mientras juega la carta de las mujeres contra mí, se equivoca".
Pero algunos expertos consideran que la estrategia de Trump no funcionará contra la campaña presidencial de Hillary.
Trump ha provocado el distanciamiento de varios bloques de votación cruciales con sus comentarios controvertidos e incluso provocadores por cuestiones de género, raza e inmigración.
"Reciclar los escándalo personales de hace dos décadas no tendrá mucha pertinencia para la campaña de 2016. Es noticia vieja y las personas no serán afectadas por esto", dijo a Xinhua el importante investigador de Brookings Institution Darrell West.
Bill Clinton, a pesar de sus escándalos sexuales, sigue siendo muy popular y muchos estadounidenses aprecian la fuerte economía que Estados Unidos vivió en los noventa cuando Clinton era presidente, señaló West.
"Trump está intentando distraer a los votantes de sus propios asuntos personales con mujeres", añadió.
De hecho, Trump fue acusado de hacer varios comentarios sexistas, como reírse de la imagen de la aspirante a la candidatura republicana Carly Fiorina.
Por su parte, Bill Clinton ha tenido una historia de lo que los críticos llaman conducta sexual poco ética, además del asunto de Lewinsky.
En una entrevista transmitida por televisión a nivel nacional en Dateline NBC en 1999, Juanita Broaddrick, una administradora de una residencia para ancianos, afirmó que Bill Clinton la violó cuando competía por la gubernatura.
La ex funcionaria pública de Arkansas Paula Jones presentó una demanda civil de acoso sexual contra Bill Clinton y en un arreglo fuera del tribunal Clinton le pagó 850.000 dólares.
