RECUERDOS DE LOS SUPERVIVIENTES
"Al observar el lodo que se aproximaba a nosotros como olas del mar, empecé a correr y no me atreví a ver atrás. Sentí que habría sido tragada por él si me retrasaba un segundo", recordó Wang, quien trabajaba en una fábrica cercana al sitio.
Después de correr durante cuatro o cinco minutos, la mujer dio un rápido vistazo hacia atrás y no vio más que una espesa nube de polvo. "Un trabajador intentaba salvar su motocicleta pero quedó sepultado bajo los escombros".
Zhong Guanguo, de 50 años de edad, estaba preparando el almuerzo cuando ocurrió el alud de lodo.
"Al principio escuché que la gente gritaba '¡corran, corran!' desde afuera de mi casa", recordó.
"Cuando salí corriendo, el lodo me golpeó el rostro", dijo. Apenas pudo escapar con su esposa, pero sus pertenencias quedaron sepultadas en su casa.
