RIO DE JANEIRO, 17 dic (Xinhua) -- El Gobierno brasileño considera que la tragedia ambiental que se produjo a inicios de noviembre en Mariana (sureste del país), donde la ruptura de dos diques de un depósito de residuos mineros dejó 17 muertos y 2 desaparecidos, sirvió para mejorar el sistema de fiscalización de las empresas mineras.
"Lanzamos una nueva estructura de fiscalización (de los depósitos mineros) para evitar que se vuelva a ocurrir una tragedia de esas", aseguró hoy ante la prensa el ministro de Comunicación, Edinho Silva, quien admitió que tras los hechos, todas las autoridades, desde el nivel municipal hasta el Federal, aumentaron la fiscalización de las compañías mineras.
El ministro consideró que lo ocurrido en Mariana es de "responsabilidad empresarial", y debido a ello Samarco, la empresa responsable del depósito, ya fue multada y procesada por parte del Gobierno Federal por los daños que causó.
Según él, la minera, controlada por las gigantes Vale y BHP, "tiene la obligación de reparar todos los daños humanos, ambientales, urbanos y económicos que provocó".
La tragedia, considerada como el peor desastre ambiental de la historia de Brasil, se produjo el pasado 5 de noviembre, cuando por causas desconocidas, se rompieron los diques de dos presas de un depósito de residuos mineros de Samarco, provocando el vertido de 62 millones de metros cúbicos de agua y residuos minerales, que sepultó algunas poblaciones y dejó un rastro de lodo tóxico en miles de kilómetros cuadrados.
Silva agradeció los consejos apuntados por un Grupo de Trabajo (GT) de las Naciones Unidas enviado al local de los hechos, que ayer presentó un informe en el que advertía sobre la posibilidad de que se repitan accidentes similares al de Mariana si el Gobierno no aumenta la fiscalización en depósitos similares.