BEIJING, 17 dic (Xinhua) -- Las amenazas terroristas han ensombrecido el mundo este año como nunca antes, con los grupos terroristas y sus seguidores saltando a los titulares en todas las partes del planeta, especialmente en Francia y Estados Unidos, dos aliados transatlánticos en la lucha contra el terrorismo.
El número de 130 muertos en los ataques ocurridos el pasado noviembre en París es el mayor de una actividad terrorista en la historia moderna de Francia, y el segundo mayor en Europa tras los atentados del 11-M en Madrid, España, que dejaron un total de 192 fallecidos. Su autor, el grupo yihadista Estado Islámico (EI), dijo en una declaración que esto no es nada más que el comienzo.
Poco después de lo ocurrido en la capital francesa, 14 personas perdieron la vida a consecuencia de un tiroteo en San Bernardino, California (EEUU), a manos de una pareja que, según se confirmó posteriormente, había sido radicalizada durante un largo periodo de tiempo.
Según expresó Diaa Rashwan, director del Centro Al Ahram de Estudios Políticos y Estratégicos, con base en El Cairo, los centros tradicionales más importantes del EI son Siria e Irak, mientras que Libia se encuentra en segundo plano.
No correspondería a los intereses del EI centrarse en enemigos lejanos, dado que el grupo siempre busca la expansión de tierras con el objetivo de crear un Estado, tal como sugiere su nombre, añadió.
Sin embargo, los ataques en París suponen un cambio cualitativo del EI en su estrategia, aseveró Rashwan.
CAUSAS BASICAS DEL TERRORISMO
La periodista independiente egipcia Shahira Amin puntualizó que muchos optaron por sumarse al EI debido a la situación interna en algunos países, sea política, social o religiosa, en que los jóvenes no pueden encontrar puestos de trabajo, ni albergan esperanzas para el futuro.
"La lucha contra el terrorismo necesita esfuerzos concertados de todo el mundo", subrayó.
Por su parte, Sarah Eltantawi, catedrática de Religión Comparativa y Estudios Islámicos del Colegio Estatal Evergreen, en EEUU, también mencionó que la generalizada frustración en materia económica y política ha facilitado la creación de un semillero del terrorismo.
El hecho de que el Islam haya sido adoptado por ultraconservadores constituye uno de los desafíos más intensos, a la hora de promover y rehabilitar lo que solía ser la corriente dominante, el Islam suave, señaló.
NUEVA TENDENCIA EN ATAQUES TERRORISTAS
El creciente uso de elementos occidentales que se incorporaron a grupos terroristas en Oriente Medio y participaron en ataques allí y luego volvieron con importantes tareas a sus países natales, ha sido considerado como una nueva tendencia en la orquestación de los ataques a menudo mortales.
"Hay elementos del EI pero en Occidente", indicó Rashwan. Esto puede observarse claramente en la precisión del comunicado que emitió el EI tras los ataques de París, en el que declaró que ocho miembros habían llevado a cabo los ataques y reveló los sitios exactos que habían sido atacados y otros detalles.
Al mismo tiempo, los celosos preparativos y la ejecución impecable han dificultado la detección y prevención de los atentados.
Como se demostró en los ataques de París, el número de efectivos involucrados en las operaciones no es menos de 30, lo que refleja una preparación y ejecución minuciosas.
Los ataques parisinos también revelan los grandes esfuerzos realizados por los terroristas para ostentar su poder y retar a las autoridades, ya que entre sus objetivos estaba el lugar donde se encontraba el presidente francés, Francois Hollande, en aquel momento.
Durante el inusual discurso que dirigió el pasado 6 de diciembre a la nación el presidente estadounidense, Barack Obama, desde la Oficina Oval, calificó de nueva fase del terrorismo los tiroteos ocurridos en San Bernardino.
EL TERRORISMO NO ES INVENCIBLE
Talaat Musallam, exgeneral del Ejército egipcio y experto en seguridad, cree que la cooperación internacional es actualmente muy débil, en especial con el aumento de las redes terroristas, no sólo en los países árabes y Oriente Medio, sino también en los países occidentales.
"No existen políticas internacionales obvias para combatir el terrorismo", recalcó Musallam.
Pidió el establecimiento de un centro internacional contra el terrorismo que se encargue de la recolección de informaciones y de la elaboración de las reglas sobre cómo derrotar el terrorismo de manera legal, además de centrarse en la resolución de algunos problemas económicos como la pobreza y el desempleo.
Richard Tutah, experto keniano en seguridad nacional, sugirió medidas para formar una alianza equivalente a la ONU y la UE cuyo propósito principal consista en hacer frente al terrorismo. La alianza, dijo, podría proporcionar una plataforma para compartir información de inteligencia entre los distintos países.
"Necesitamos una estrategia integral para lidiar con el terrorismo, ya que las medidas internacionales actuales son meras reacciones a los actos violentos perpetrados por los grupos terroristas", opinó en declaraciones a Xinhua Gehad Auda, profesor de ciencias políticas en la Universidad Británica en El Cairo.