TEHERAN, 10 dic (Xinhua) -- El viceministro de Relaciones Exteriores de Irán para asuntos Árabes y Africanos, Hossein Amir-Abdollahian, criticó los ataques encabezados por Arabia Saudí en Yemen y pidió que los suspenda completamente.
La República Islámica ha expresado reiteradamente su desaprobación a la acción militar desde que comenzó la crisis en Yemen. Teherán continuará sus esfuerzos para promover el diálogo entre los yemeníes involucrados en los conflictos, dijo el vicecanciller.
En sus comentarios durante una conversación telefónica con Ismail Ould Cheikh Ahmed, enviado especial de la ONU para Yemen, Amir-Abdollahian dio la bienvenida a la reciente iniciativa de la ONU para sostener conversaciones de paz sobre el actual conflicto en Yemen, informó Press TV.
Por su parte, el enviado de la ONU pidió a todas las partes involucradas en el conflicto contribuir a encontrar una solución al conflicto en el país.
El gobierno de Yemen, que es apoyado por Arabia Saudí, ha acusado a Irán de armar y financiar al grupo chiita houthi contra el presidente Abd-Rabbu Mansour Hadi, pero Irán rechaza esa acusación.
La coalición encabezada por Arabia Saudí e integrada por nueve países ha lanzado operaciones militares contra los houthis en Yemen desde marzo pasado, en un esfuerzo por restablecer la autoridad de Hadi.
Los ataques aéreos de la coalición y las batallas en tierra en Yemen han dejado más de 5.000 personas muertas, tanto civiles como milicianos, y más de 1,5 millones de personas han sido desplazadas.
En una cumbre del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) realizada hoy, los líderes árabes del Golfo pidieron realizar una conferencia sobre la reconstrucción de Yemen para ayudar a las facciones yemeníes a dar fin a sus confrontaciones a través de soluciones políticas, y desarrollar programas prácticos para rehabilitar la economía de Yemen.
Las partes en pugna de Yemen tienen previsto reunirse en Suiza la próxima semana para una ronda de conversaciones de paz patrocinadas por la Organización de las Naciones Unidas, y se espera que cuando inicien las conversaciones entre en vigor un cese al fuego de siete días.