NACIONES UNIDAS, 9 dic (Xinhua) -- La agencia de la ONU para los refugiados, Acnur, y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) emprendieron juntas una campaña de recaudación de 94 millones de dólares para brindar protección y ayuda el próximo año a refugiados, repatriados y migrantes que huyen del conflicto en Yemen, indicó hoy un vocero de la ONU.
Cerca del 80 por ciento de la población yemení requiere protección y ayuda, incluyendo a 2,3 millones de desplazados internos, dijo el portavoz adjunto de la ONU, Farhan Haq, durante la conferencia de prensa diaria.
Por otra parte, alrededor 170.000 yemeníes, refugiados y nacionales de terceros países han huido a Yibuti, Etiopía, Somalia, Sudán y algunos países del Golfo, indicó el portavoz.
"La campaña de recaudación entre agencias busca dar a nueve agencias participantes y 48 socios la capacidad de seguir ofreciendo alimentos, refugio, agua, saneamiento, protección, educación de emergencia y otro tipo de ayuda a las personas que llegan al cuerno de Africa desde Yemen", dijo Haq.
Las agencias "anticipan 164.000 llegadas para diciembre de 2016", añadió.
Seis meses de guerra sin tregua en Yemen han dejado al menos 505 niños muertos y 702 heridos, indicó a inicios de octubre el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés).
Unicef añadió que más de 1,7 millones de niños se encuentran en riesgo de desnutrición y 10 millones necesitan ayuda humanitaria con urgencia.
Las cifras muestran que 537.000 menores de cinco años se encuentran en riesgo de desnutrición severa y aguda, lo que ha aumentado a más del triple los 160.000 registrados antes del conflicto.
La escasez endémica de alimentos junto con un acceso reducido a instalaciones de salud y saneamiento ha sido complicada aún más por la falta de combustible, electricidad, gas y agua.
La crisis actual en el conflictivo Yemen es un reflejo de los disturbios regionales en Medio Oriente, especialmente después de que las fuerzas del presidente Abd-Rabbo Mansour Hadi, quien huyó del país, arrebataron la estratégica ciudad meridional de Adén a los combatientes chiitas houthi, según informes.
El grupo chiita houthi emprendió los ataques contra la ciudad de Adén, declarada por el presidente yemení como capital provincial tras huir de su arresto domiciliario de semanas impuesto por los houthis en Saná.
El 26 de marzo, una coalición dirigida por Arabia Saudí inició los ataques aéreos contra objetivos houthis en Saná y otras ciudades e indicó que la acción multinacional tiene como fin proteger la legitimidad de Hadi y obligar a los houthis a retirarse de las ciudades de las que se han apoderado desde septiembre de 2014.
