BEIJING, 26 nov (Xinhua) -- Los países latinoamericanos deben hacer sus contribuciones para firmar un convenio eficaz contra el cambio climático en la próxima Conferencia de las Partes (COP21) programada para finales de este mes en París, opinaron investigadores de la Comunidad de Estudios Chinos y Latinoamericanos (CECLA).
Peter Mauricio Larrea Parra, boliviano e investigador de la CECLA y estudiante de doctorado en el Instituto de Ciencia e Ingeniería Climática de la Universidad de Beijing, y Lluvia Huang, investigadora y secretaria general de la CECLA, quien está desarrollando una maestría en el Centro de Investigación de Asuntos Latinoamericanos de la Universidad Simon Fraser, publicaron un informe este mes sobre las posiciones de América Latina y el Caribe en la COP 21. El documento explica la historia de la cuestión del cambio climático y los esfuerzos del mundo para encontrar unas medidas eficaces para resolverlo.
Según el informe, hasta el 20 de octubre, 19 países de América Latina y el Caribe, entre los que se incluyen Argentina, Bolivia, Colombia, Chile, Brasil, entre otros, han entregado sus Contribuciones Previstas y Determinadas a Nivel Nacional (INDC, siglas en inglés) y establecido sus compromisos para enfrentarse con el cambio climático.
Por ejemplo, Argentina prometió reducir un 15 por ciento los gases de efecto invernadero hasta 2030 y con apoyo exterior la cifra llegará al 30 por ciento. Chile decidió rebajar la emisión de dióxido de carbono por unidad de producto interior bruto en un 30 por ciento para 2030 frente al 2007. La cifra alcanzará entre un 34 y un 45 por ciento con la ayuda exterior, además de aumentar la superficie de los bosques.
De acuerdo con los investigadores, la mayoría de los países de América Latina y el Caribe quieren limitar la subida de las temperaturas a 1,5 grados centígrados en vez de dos grados, ya que el continente es frágil ante el cambio climático.
Según el informe, los países de América Latina y el Caribe creen que diferentes países deben tomar medidas diferenciadas y la mayoría de los fondos recaudados por el cambio climático deben ser destinados a las naciones y regiones en vías de desarrollo. Estos países se opondrán a la comercialización de las tecnologías ecológicas, ya que no tienen ventajas en esta materia.
Es importante dejar de lado la política para llegar a un tratado de carácter obligatorio en la cumbre de París, agregó el informe.