ESTAMBUL, 25 nov (Xinhua) -- El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, afirmó este miércoles que su país no tiene intención de intensificar la tensión con Rusia, un día después de que el Ejército turco derribase un avión de combate ruso, provocando la ira de Moscú.
"No tenemos ninguna intención de intensificar la tensión con Rusia, solo estamos defendiendo nuestra seguridad", aseveró el líder turco en una reunión con países islámicos celebrada en Estambul.
El presidente ruso, Vladimir Putin, definió el miércoles el derribo por parte de Turquía de un caza ruso Su-24 como "una puñalada por la espalda por parte de los cómplices de los terroristas", y advirtió de "serias consecuencias en las relaciones Moscú-Ankara".
Erdogan aseguró que Turquía nunca está a favor de "las tensiones y las crisis" y que continuará promoviendo la paz, el diálogo y la diplomacia como siempre.
Añadió, sin embargo, que nadie debe esperar que Turquía "permanezca callada" cuando su seguridad fronteriza es violada.
Erdogan también reveló que dos ciudadanos turcos que se encontraban en la parte turca de la frontera resultaron heridos por piezas caídas del avión ruso derribado.
El presidente turco instó a los países islámicos a permanecer juntos contra el terror del Estado Islámico y a no permitir a los terroristas que hagan un uso incorrecto del islam.