A diferencia de los telescopios ópticos usados para observar el universo con luz visible, un tipo de radiación electromagnética, el radiotelescopio opera en la porción de frecuencia de radio del espectro electromagnético donde detecta y recolecta datos de fuentes de radio.
Las metas científicas clave del FAST se basan en lo observable entre las frecuencias de 70MHz y 3 GHz, incluida la línea de estructura hiperfina HO de 21 cm, emisiones pulsares y el continuo de radio.
Los primeros informes indican que permitirá a los astrónomos dar un salto importante en muchas metas científicas. Por ejemplo, pueden estudiar el hidrógeno natural en las galaxias distantes, detectar pulsares débiles, buscar la primera estrella brillante, o hasta escuchar posibles señales de otras civilizaciones.