NANJING, 20 nov (Xinhua) -- A medida que la gente acoge el nuevo billete de 100 yuanes emitido hace nueve días, su versión antigua se está convirtiendo en cenizas en la provincia oriental china de Jiangsu, en donde se están quemando billetes viejos por valor de miles de millones.
No se trata de valorar lo nuevo y rechazar lo viejo, sino de transformar los residuos en riqueza, puesto que los billetes cortados de 100 yuanes pueden utilizarse para generar electricidad a través del incinerador de la ciudad de Yancheng.
Ubicada en el distrito de Yandong, la empresa Yancheng Biomass Power Generation recicla los billetes de 100 yuanes cortados de todo el país desde 2014.
Mide el dinero no por su valor impreso, sino por el peso. Toneladas de billetes cortados de 100 yuanes son triturados y enviados a Yancheng en camiones.
"Cada camión transporta 30 toneladas de divisa hecha tiras, cuyo valor original es de 3.000 millones de yuanes (alrededor de 500 millones de dólares)", explicó un ingeniero de combustible de la empresa, Zhu Hongwei, que agregó que se transportan cinco camiones cada mes.
Considerando que el consumo de electricidad es de 100 kilovatios hora por familia al mes, quemar el contenido de un camión puede dar suministro a una familia durante 25 años, al generar 30.000 kilovatios hora.
En comparación con otros combustibles biológicos como el serrín, los billetes quemados tienen un alto valor calórico y menos contenido de agua, lo que los hace más adecuados para la generación eléctrica con biomasa.
Además, las cenizas que quedan después de la incineración pueden transformarse en ladrillos, ofreciendo a la gente apartamentos construidos con paredes hechas de dinero.
La compañía ha incinerado en torno a 2.000 toneladas de billetes cortados desde mayo de 2014.Con un sistema para retirar el polvo y haciendo ladrillos a partir de las cenizas, garantiza una gestión de residuos sostenible e inofensiva.
