MEXICO, 6 nov (Xinhua) -- México deporta, por primera vez, más migrantes procedentes de Centroamérica que Estados Unidos, aseguró el investigador del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), Carlos Heredia.
Durante su participación en el foro "La Política Migratoria Mexicana hacia Centroamericana", que se realizó en el Museo de la Memoria y la Tolerancia, el académico dijo a Xinhua que las estadísticas muestran más deportaciones de migrantes centroamericanos desde México.
"Las estadísticas estadounidenses están conforme al año fiscal (del 1 de octubre al 30 de septiembre) y las mexicanas al año calendario (enero-diciembre), por lo que no son exactamente comparables, pero si en cada país tomamos en consideración los últimos 12 meses, México deportó 150.000 migrantes centroamericanos, mientras que Estados Unidos 120.000".
"En los últimos 12 meses, por primera vez México deportó más centroamericanos que Estados Unidos, lo que lleva a la pregunta ¿cuál es la política migratoria de México?", cuestionó.
El académico explicó que llega gente a México huyendo de violencia, de amenazas de pandilla, asesinatos y no se les da el derecho de audiencia o petición de asilo o refugio, sino que se les deporta de forma sumaria "fast track" (vía rápida), señaló.
"¿Cuál es la política migratoria mexicana? ¿La que está escrita en la Ley de Migración, o la que ocurre en los hechos?, en que esa política migratoria es denegada de facto, por los imperativos de las fuerzas de seguridad que realizan su tarea de expulsar al centroamericano en cuanto los ven", indicó.
Heredia alertó que no se atiende la situación que orilla al centroamericano a dejar su país.
Precisó que el migrante es aquél que sale en busca de mejores oportunidades económicas, mientras que el desplazado es el que ya no puede vivir en su lugar por alguna amenaza, pero puede ir a otro sitio en su propio país.
"Aquí se habla de desarraigados, de personas que son expulsadas por su país, maltratadas por el país de tránsito, rechazadas en el país de destino e imposibilitadas de regresar a su propia patria", indicó.
El también investigador del Colegio de la Frontera Norte, Tonatiuh Guillén, agregó que cada vez más existen personas con necesidad de refugio, condición que no se analiza a profundidad.
Así como exige a Estados Unidos mejor trato a sus connacionales, México debe aplicar un mejor trato a los migrantes centroamericanos.
Otro tema que se está generando es que así como los mexicanos buscan trabajar en Estados Unidos, así ocurre con un gran número de guatemaltecos que buscan colocarse, principalmente en Chiapas, en el sector agrícola.
Para dar una idea de este naciente mercado laboral, Guillén mencionó que en 2007 se contabilizaron 850.000 cruces de mexicanos hacia Estados Unidos.
El año pasado, en la frontera sur, se detectaron 760.000 cruces de centroamericanos a México.
El investigador señaló que ese mercado laboral puede ser el gran eje de elevar su calidad en términos de trato civilizado porque pagamos pésimo, no hay seguridad social, hay condiciones laborales muy precarias, es un desafío el de civilizar ese mercado
También es la gran oportunidad de construir un desarrollo regional México-Guatemala ejemplar, en términos de un escenario de desarrollo compartido en la región y en la frontera común en términos de colaboración y corresponsabilidad.
En tanto, el director del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social, Agustín Escobar, recordó que México creó en 2011 la Ley de Migración que fue un gran paso, positivo, pero no suficiente.
"Necesitamos lanzar un programa concreto, primero de definición de política interna que México quiere y que la ley prevé, pero que no lleva a cabo", reiteró.
También debe aplicar una política de colaboración que se defina abiertamente en consulta, con la colaboración de otros países, incluido Estados Unidos, como corresponsable de la cantidad de la naturaleza y la criminalización de este flujo, concluyó.