MADRID, 27 oct (Xinhua) -- El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, afirmó hoy que el Estado frenará las pretensiones de quienes buscan separarse de la comunidad autónoma de Cataluña, tras la resolución independentista de los grupos Junts pel Sí y la Cup.
El mandatario aseveró que no renunciará a ninguno de los mecanismos que proporciona la Constitución y las leyes, tras calificar como "provocación" la propuesta secesionista.
"Esta iniciativa es un acto de provocación de quien quiere saltarse la ley, porque sabe que no está de su parte", sostuvo el funcionario español.
Rajoy advirtió que el Estado no renunciará al uso de ninguno de los mecanismos políticos y jurídicos de los que dispone en defensa del país y del cumplimiento de la ley y la Constitución.
Dijo que la resolución impulsada por los dos grupos catalanes que buscan separarse del país va en contra de la Constitución, la ley, el sentir mayoritario de los españoles y la voluntad democrática de todos en España.
"Quienes quieren separar y dividir España, no lograrán ni uno solo de sus objetivos. Su propuesta no tendrá ningún efecto. No lo van a lograr, porque tienen enfrente a la ley y a la mayoría de los españoles", dijo Rajoy.
Reiteró que defenderá a la nación ibérica "con fuerza y determinación", porque "España seguirá siendo una nación de ciudadanos libres e iguales".
"España, mientras yo sea presidente del Gobierno, será un país unido", subrayó el mandatario español.
Las dos formaciones independentistas del Parlamento de Cataluña, Junts pel Sí y CUP, acordaron este martes la resolución que pretendeden aprobar para declarar "el inicio del proceso de creación del Estado catalán independiente".
Según el documento, el Estado de Cataluña tendrá "forma de República" y romperá con el Estado español.
El Ejecutivo de España tiene la posibilidad de recurrir en última instancia a la aplicación del artículo 155 de la Carta Magna, que implica la intervención de facto de las competencias de Cataluña y la suspensión de su autonomía.
El funcionario recibió el apoyo del líder opositor del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez; del representante del partido Ciudadanos, Albert Rivera, favorito para las elecciones generales del 20 de diciembre próximo; y del gobernante Partido Popular (PP).
