En términos mensuales, los precios al productor en septiembre bajaron un 0,4 por ciento.
Los precios de los materiales de producción disminuyeron un 7,7 por ciento en septiembre, contribuyendo en 5,8 puntos porcentuales a la caída del IPP durante el mes, mientras que los de los bienes de consumo bajaron un 0,3 por ciento en el mismo período.
Además del IPP, también se reveló el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de China, que subió un 1,6 por ciento en septiembre, quedándose por debajo del pronóstico del mercado del 1,8 y del 2 por ciento de subida de agosto.
La tendencia a la baja y el ralentizado IPC subrayaron la presión de la deflación en China según Minsheng, lo que hace prever una alta posibilidad de futuras reducciones en las tasas de interés y en el coeficiente de reserva obligatoria de los bancos para el último trimestre del año.
China está luchando contra una desaceleración del sector inmobiliario, una excesiva capacidad industrial, la debilidad de la demanda y unas decaídas exportaciones, factores que han lastrado el crecimiento hasta situarlo en el 7 por ciento en la primera mitad del año. Los datos de crecimiento del tercer trimestre serán dados a conocer la próxima semana.
