GUADALAJARA, Mexico 12 oct (Xinhua) -- La IX Cumbre CHINA-LAC, que se desarrolla a partir de mañana en esta ciudad occidental de México, espera acoger alrededor de 2.000 empresarios provenientes de China, América Latina y el Caribe y será una oportunidad para explorar nuevas posibilidades de negocio e inversiones a favor de ambas regiones, explicó a Xinhua, uno de los organizadores.
Esta Cumbre, que cumple su novena edición, es organizado por ProMexico, órgano federal que promueve las inversiones y exportaciones mexicanas, la Internacionalización de las empresas mexicanas por el estado de Jalisco, al que pertenece la ciudad anfitriona de Guadajalara, el Consejo Chino para el Fomento del Comercio Internacional (CCPIT) y el Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (COMCE).
"En esta novena edición de la Cumbre se ha despertado especialmente un gran interés de tener mayor contacto con las empresas chinas y por ello estará abierto a todos los sectores, importadores y exportadores", explicó en entrevista a esta agencia informativa Sergio Ley López de COMCE.
López, quien también fuera embajador de México ante China (2001-2006), destacó la importancia de dicho foro ya que "ayudará a reforzar la cooperación entre ambas regiones en materia de negocios, es decir, que empresas latinoamericanas, del Caribe y chinas, juntas puedan conquistar mercados de ambos compartiendo y consolidando".
Asimismo, dijo que para México y toda la región Latinoamérica, existe un gran interés por conocer los ajustes importantes al nivel de desarrollo económico que ha hecho China y "creo que esta Cumbre será una buena oportunidad para conocer y compartir intereses e inquietudes", puntualizó.
China es el segundo país principal de origen de las importaciones de la región y el tercer principal destino de sus exportaciones, de acuerdo con el estudio más reciente de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Por su parte, la región también ha aumentado su importancia como socio de China.
La CEPAL señala que mientras en el 2000, absorbía el 3 por ciento de las exportaciones totales de China y era el origen del 2 por ciento de sus importaciones, en 2013, su participación en ambos flujos ascendió a 6 y 7 por ciento, respectivamente.