En 1985, Xi encabezó una visita de delegación agrícola de la provincia china norteña de Hebei a Iowa, en donde visitaron granjas locales, fábricas, zonas de comida campestre y a una familia local de la ciudad de Muscatine, dijo Branstad al recordar la primera visita de Xi a Iowa hace 30 años.
Branstad desempeñaba su primer período como gobernador de este estado del oeste medio de Estados Unidos en 1985.
Durante una visita a Estados Unidos como vicepresidente chino en 2012, Xi regresó a Muscatine. La profunda amistad entre Xi y los estadounidenses comunes y corrientes impresionó a muchas personas, incluyendo a Branstad.
"Estas relaciones personales nos han acercado", dijo el gobernador.
"Esperamos que tenga una visita a Estados Unidos muy exitosa y fructífera", dijo Branstad, quien descartó la retórica de campaña contra China impulsada por algunos candidatos presidenciales estadounidenses.
"No estoy de acuerdo con las personas que quieren crear una actitud de confrontación", indicó el gobernador. "Creo que tener un espíritu de cooperación y colaboración beneficia a ambos países".
"Espero que el próximo presidente de Estados Unidos conduzca a una mayor cooperación, a un comercio más amplio y no la confrontación", añadió el gobernador.