BEIJING, 20 ago (Xinhua) -- La moneda china se ha mantenido estable ante el dólar estadounidense por una semana, lo cual sugiere que el mercado se ha calmado después de la sacudida de la depreciación de la semana pasada.
El tipo de paridad central del yuan, o renminbi, recuperó tres puntos porcentuales ante el dólar para situarse en 6,3963 ayer miércoles.
Durante la semana pasada, el tipo de cambio al contado entre el dólar y la moneda china ha oscilado alrededor de 6,39, tres puntos porcentuales por encima de su nivel previo a las reformas aplicadas por el banco central el martes de la semana pasada, que devaluaron el yuan en un 2 por ciento.
Dicha medida incitó una ola de ventas cuando comenzaron a surgir entre los operadores preocupaciones por si el banco central permitiría una caída aún mayor del yuan.
En respuesta a las dudas, el banco indicó que un descenso del 3 por ciento ubicaría la moneda a un nivel razonable y rechazó la noción de que la devaluación se hubiera diseñado con el objetivo de contrarrestar la debilidad de las exportaciones.
El mercado se estabilizó durante la semana pasada.
"La rápida depreciación ha terminado", anunció Wang Han, analista de Industrial Securities. "La estabilización será la temática principal".
Wang puntualizó la probabilidad de que el banco central mantuviera el renminbi estable en su nivel actual para calmar las expectativas del mercado.
Al tiempo que la reforma del tipo de paridad central contribuye a que el yuan refleje de manera más efectiva el consenso del mercado y la depreciación del 3 por ciento alivia la presión a la baja, el yuan estabilizado puede ayudar a que los inversores recuperen su interés en productos relacionados con China.
El yuan de China se mantiene fuerte en una época en que el euro, el yen y muchas monedas de economías emergentes han registrado declives importantes ante el dólar estadounidense.
De acuerdo con el Banco de Pagos Internacionales, desde 2014 el yuan se ha apreciado en un 10,28 por ciento en su tipo de cambio efectivo nominal, y un 9,54 por ciento en el tipo de cambio efectivo real, de modo que, pese a la reducción del 3 por ciento, el renminbi sigue siendo más atrayente para la inversión que las divisas de muchos otros países asiáticos.
Ding Shuang, economista en jefe para China de Stardard Chartered, opinó que el yuan podría seguir apreciándose en el tipo de cambio efectivo real a medida que el dólar extiende su subida.
"Sin embargo, el ascenso del yuan no será tan significativo como en el pasado", afirmó.
Ding estimó que el tipo de cambio entre el dólar y el yuan podría alcanzar el 6,5 hacia finales de 2015, antes de volver a bajar hasta el 6,35 para finales de 2016, puesto que el dólar estadounidense no mantendría una fortaleza constante.
El Banco Popular de China declaró el pasado jueves que no existe ningún motivo para una depreciación del yuan persistente y sustancial a largo plazo, comprometiéndose a intervenir para prevenir oscilaciones excesivas.
"El yuan chino sigue siendo una moneda fuerte", dijo Zhang Xiaohui, vicegobernadora del banco emisor.
En su opinión, el enorme superávit en cuenta corriente del país, el sólido crecimiento económico y las abundantes reservas de divisas extranjeras mantendrán la fortaleza del yuan a largo plazo.
Los analistas también mostraron su confianza en que, ya que China está promoviendo el uso internacional de su moneda, el regulador mantendrá el yuan fuerte para que sea atracctivo a nivel global.
"Los inversores recuperarán su confianza en el yuan estabilizado", dijo Xie Yaxuan, director del centro de investigación macroeconómica de China Merchants Securities. "No habrá un flujo de salida de capital significativo.
Xie dijo que los inversores extranjeros pueden tener mayor interés en activos denominados en yuan tras la depreciación.
Otra firma de calificación, Moody's, estimó que la reforma en el mecanismo de gestión del tipo de cambio resulta un avance positivo para el crédito, ya que apoya los objetivos del gobierno relativos a la liberalización de la cuenta de capital y una mayor flexibilidad de la moneda.
Moody's se mostró confiada en que una depreciación importante del yuan es poco probable dados los robustos factores fundamentales de China.