BEIJING, 18 ago (Xinhua) -- Soldados japoneses de la II Guerra Mundial se entrenaron con bayoneta usando civiles chinos vivos como blanco, según un criminal de guerra cuya confesión de matanzas y violaciones fue publicada hoy martes por la Administración Estatal de Archivos (AEA).
En la octava de una serie de 31 confesiones de criminales de guerra japoneses publicadas por la AEA en su página web como parte de las conmemoraciones del 70º aniversario del fin de la II Guerra Mundial, Fukuo Uezono cuenta con detalle sus brutales actos en China entre 1939 y su captura en agosto de 1945.
Uezono mató con su bayoneta a un campesino chino durante un entrenamiento en septiembre de 1940 en el distrito de Pinglu, en la provincia septentrional de Shanxi. Otros nueve civiles chinos murieron a manos de soldados japoneses en el mismo entrenamiento.
Uezono participó en la tortura de dos campesinos en el distrito de Anyi, Shanxi, en julio de 1939, colgándolos, ahogándolos con agua, golpeándolos y quemándolos hasta la muerte.
En abril de 1943, Uezono arrestó a un campesino en la provincia de Henan y dio instrucción de ahogarlo hasta morir. Además, estuvo implicado en el asesinato de al menos otros cuatro campesinos en otras ocasiones.
Entre diciembre de 1942 y junio de 1945, Uezono cometió 18 violaciones en Shandong, y mató después a una mujer.
Un total de 31 confesiones de criminales de guerra japoneses están siendo publicadas en la red, una por día, coincidiendo con las próximas conmemoraciones del fin de la guerra el 3 de septiembre.
Las confesiones manuscritas, así como sus traducciones y resúmenes en chino e inglés, están siendo colgadas en la página web de la AEA.
Las confesiones muestran en detalle los crímenes perpetrados por los nipones, entre ellos la matanza, esclavitud y envenenamiento del pueblo chino, así como el uso de armas biológicas y químicas en seres humanos vivos.
