BEIJING, 15 ago (Xinhua) -- China expresó hoy sábado su "fuerte oposición e insatisfacción" ante la visita de tres ministras del gabinete japonés al santuario Yasukuni el día en que se conmemora la rendición de Japón en la II Guerra Mundial.
"El santuario Yasukuni es un símbolo de la guerra de invasión lanzada por los militaristas japoneses. Los ministros visitaron el santuario que rinde homenaje a criminales de clase A de la II Guerra Mundial y encubre la guerra de invasión, cuando en tal día como hoy los militaristas japoneses anunciaron la rendición incondicional, lo que demuestra una vez más la actitud errónea de la parte japonesa ante los asuntos históricos", opinó la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China Hua Chunying.
Haruko Arimura, ministra a cargo de la política de la Mujer; Sanae Takaichi, ministra de Asuntos Internos, y Eriko Yamatani, ministra de Estado para la Administración de Desastres, rindieron homenaje en el santuario hoy sábado.
El primer ministro, Shinzo Abe, también envió a su ayudante Koichi Hagiuda para hacer una ofrenda ritual en el santuario como líder del gobernante Partido Liberal Democrático hoy por la mañana, un día después de que hiciera una declaración para conmemorar el 70º aniversario del fin de II Guerra Mundial en que faltó una disculpa sincera.
Hua dijo que este año marca el 70º aniversario de la victoria de la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa y la victoria de la II Guerra Mundial, lo que también es un momento importante para que la comunidad internacional repase la historia y trace el futuro.
"Japón podrá quitarse la carga histórica y enfrentarse al futuro sólo cuando haga frente a su historia invasora y reflexione profundamente sobre ella y trace una clara línea de separación con el militarismo", apuntó la portavoz.
Hua exigió a Japón que cumpla su declaración y compromiso solemnes a China y a la comunidad internacional en materia de los asuntos históricos con acciones reales y trate apropiadamente los asuntos relacionados, a fin de obtener de nuevo la confianza de sus vecinos asiáticos y de la comunidad internacional.
