Un analista del Buró Nacional de Estadísticas, Zhao Qinghe, atribuyó la baja a la debilidad continuada tanto de la demanda doméstica como de la externa.
Zhao también atribuyó la reducción de producciones planificada de algunas empresas a las reparaciones de equipos o la actualización de tecnología, además de a las desfavorables condiciones meteorológicas, como tormentas y temperaturas altas que afectaron a la producción.
El subíndice de producción se situó en 52,4 el mes pasado, más bajo que el 52,9 de junio. El subíndice de nuevos pedidos se situó en 49,9 en julio, cifra que es 0,2 puntos porcentuales inferior a la del mes anterior, lo que indica que las demandas se mantuvieron débiles, muestran los datos publicados.
Una cifra superior a 50 indica expansión, mientras que una por debajo de ese nivel representa contracción.