LA HABANA, 26 jul (Xinhua) -- La delegación cubana que participó en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015 que concluyen este domingo, terminó en el cuarto lugar del medallero, muy lejos de lo esperado por la afición y los dirigentes deportivos de la isla.
Los cubanos alcanzaron en el certamen continental 36 medallas de oro, 27 de plata y 34 de bronce, para quedar en cuarto sitio por detrás de Estados Unidos (101-78-81), Canadá (77-68-69) y Brasil (41-38-60).
"Aspiramos a retener el segundo lugar por países a pesar del incremento de las exigencias a vencer", dijo hace poco más de un mes en un programa de radio el presidente del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder), Antonio Becali.
Es la primera vez que la delegación de la isla no alcanza el segundo lugar continental desde 1991, cuando incluso terminó en primer puesto en los juegos organizados por La Habana.
Los cubanos se posicionaron en el subliderato regional desde los Juegos Panamericanos de Cali (Colombia) en 1971, superados solo por Estados Unidos.
Este 2015, Cuba envió a Canadá una delegación de alrededor de 480 deportistas con el objetivo de garantizar su posición histórica.
Las 36 medallas de oro alcanzadas estuvieron, no obstante, muy por debajo de los 58 títulos que lograron los cubanos hace cuatro años en la ciudad mexicana de Guadalajara en el estado occidental de Jalisco.
Los deportistas nacionales tuvieron así una dolorosa caída al cuarto escaño continental, después de la delegación de Brasil que ocupó el tercer lugar.
La brecha incluso puede ampliarse al finalizar la jornada de este domingo, porque los nacionales ya no tendrán acción, mientras que estadounidenses, canadienses y brasileños pueden aumentar su medallero.
Entre las competencias panamericanas que faltan por completarse está el partido entre Argentina y Brasil en la final del voleibol masculino.
La debacle de los caribeños se hizo patente en el deporte nacional de la isla, el beisbol, donde el representante de la isla apenas pudo alcanzar la presea de bronce tras un pálido desempeño.
El boxeo, también considerado como "buque insignia" de la armada deportiva de la isla, no pudo cumplir las expectativas a pesar de llevar a diez hombres a la final, donde tuvo que conformarse con la mitad de los títulos, aunque estuvo perjudicado por el arbitraje.
Más allá de las imperfecciones de los jueces, las deserciones de algunos atletas también marcaron el accionar de la comitiva cubana.
El caso más sonado parece ser el del equipo masculino de hockey, ocho de cuyos 16 integrantes no se presentaron la víspera al partido final.
Alexander Abreu, Dani Alonso, Yendry Delgado, Adrián Molina, Raidel Ortiz, Minel Prado, Vladimir Prado y Yoel Veitia, según la planilla oficial del encuentro, no acudieron a la cancha de la Universidad de Toronto.
A esas deserciones se sumaron las reportadas el pasado 15 de julio en las que estuvieron involucrados los remeros Liosmel Ramos, Wilber Turro, Manuel Suárez y Orlando Sotolongo, este último ganador de una plata como parte de la tripulación de cuatro pares de remos cortos.
Con anterioridad, Yadiel Hernández y Luis Yander, dos jugadores de béisbol, también abandonaron la delegación cubana para quedarse en Estados Unidos donde participaban en un tope preparatorio.
Durante los Panamericanos disptados en la también ciudad canadiense de Winnipeg en 1999, desertaron otros ocho integrantes de la delegación nacional.
Los cubanos que pisan territorio de Estados Unidos pueden beneficiarse de la llamada Ley de Ajuste Cubano, legislación aprobada en 1966 que concede de forma inmediata permisos de residencia y trabajo, privilegio que no tienen otros inmigrantes.