SAO PAULO, 2 nov (Xinhua) -- El Gobierno de Brasil ha finalizado la instalación del proyecto "AmazonFACE", la estación científica más importante del mundo en selvas tropicales, destinada a estudiar la manera en que la Amazonia reacciona al aumento de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera, así como los efectos del cambio climático, difundió hoy domingo la prensa brasileña.
La iniciativa se inscribe en la agenda de compromisos ambientales del país sudamericano de cara a la 30ª Conferencia de las Partes (COP30) de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que se llevará a cabo del 10 al 21 de noviembre en la ciudad brasileña de Belém, en el estado amazónico de Pará (norte), según lo publicado por el diario "Folha de Sao Paulo".
El coordinador de Ciencia del Clima del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MCTI) de Brasil, Márcio Rojas, explicó que "AmazonFACE" representa una iniciativa estratégica del Estado para ampliar el conocimiento sobre el papel de la Amazonia en la regulación del clima global.
"La información que se va a generar aquí será absolutamente relevante no solo para el Brasil, sino para el planeta. Es probablemente el proyecto más importante en la ciencia climática actual", dijo el funcionario.
El proyecto, considerado el mayor experimento a cielo abierto sobre cambio climático en regiones tropicales, fue desarrollado por el MCTI y el gubernamental Instituto Nacional de Investigaciones de la Amazonia (INPA, siglas en portugués), en cooperación con el Gobierno del Reino Unido y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Con una inversión de 260 millones de reales (unos 45 millones de dólares), la iniciativa busca entender la manera en que los ecosistemas amazónicos responderán a los niveles crecientes de CO2 en la atmósfera.
Ubicado a unos 80 kilómetros de Manaos, capital del estado de Amazonas (norte), "AmazonFACE" está compuesto por 96 torres metálicas de 30 metros de altura dispuestas en seis anillos dentro de una zona de selva primaria.
Cada estructura liberará CO2 para elevar en 200 partes por millón la concentración del gas y simulará las condiciones previstas para las próximas décadas, lo que permitirá observar la respuesta de árboles y dinámica del bosque.
El objetivo es entender si la selva amazónica podrá seguir como una fuente absorbente de CO2 o si se convertirá en emisor.
Más de 100 investigadores y técnicos, tanto brasileños como extranjeros, participarán en los trabajos de investigación, cuyos resultados serán incorporados a los modelos de predicción climática del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC, siglas en inglés).
"AmazonFACE" permitirá comprobar una de las mayores incertidumbres del clima futuro: la manera en que reaccionará la Amazonia al aumento del CO2 atmosférico.
El Gobierno brasileño considera al proyecto como una inversión estratégica de Estado y una demostración de su liderazgo en la COP30 respecto a si se puede o no evitar, mediante la conservación y el manejo sostenible de bosques, el llamado "punto de no retorno", es decir, que la selva deje de absorber CO2 para convertirse en emisor.









