NUEVA YORK, 6 jun (Xinhua) -- La amenaza de Elon Musk, de la cual se retractó posteriormente, de impedir que la NASA utilice la nave espacial Dragon de SpaceX asestaría un enorme golpe a la NASA, lo que privaría a la agencia espacial del único vehículo estadounidense capaz de transportar astronautas a la Estación Espacial Internacional (EEI) y cambiaría drásticamente la forma en la que la NASA tiene acceso al laboratorio orbital de 100.000 millones de dólares, informó The Washington Post.
La amenaza, publicada en X, se produjo durante la intensificación del conflicto entre el hombre más acaudalado del mundo y el presidente Donald Trump, luego de que Trump amenazó con cancelar todos los contratos federales de la compañía de Musk. "Dada la importancia de SpaceX para múltiples programas federales, cortar tales relaciones podría dejar a la NASA, así como al Pentágono y a las agencias de inteligencia, abandonados a su suerte", destacó el informe.
Varias horas después de lanzar la amenaza, Musk transigió y publicó en una respuesta en X que debería tranquilizarse y reconsiderar: "De acuerdo, no retiraremos del servicio a Dragon".
En el transcurso de los años, SpaceX se ha convertido en un contratista vital, ha lanzado carga útil delicada relacionada con la seguridad nacional como satélites que advierten sobre misiles, comunicación de campo de batalla y municiones de guía para objetivos precisos.
En una declaración, Bethany Stevens, secretaria de prensa de la NASA, no abordó la forma en la que la NASA trasladaría a sus astronautas a la EEI sin SpaceX, y solo escribió que "la NASA seguirá ejecutando la visión del presidente para la conquista del espacio. Seguiremos trabajando con nuestros socios en la industria para garantizar que se cumplan los objetivos del presidente en el espacio".