SHANGHAI, 17 abr (Xinhua) -- La rápida evolución del sector de vehículos de nueva energía (NEV, siglas en inglés) en China está motivando a las corporaciones multinacionales a reestructurar sus estrategias en el país, lo que ha impulsado a algunas a ampliar las inversiones locales en investigación y desarrollo (I+D), producción y cadenas de suministro.
El gigante químico alemán BASF anunció esta semana una inversión de 500 millones de yuanes (unos 69,3 millones de dólares) para la expansión de su planta Cellasto en Shanghai, que ofrece soluciones de reducción de ruido, vibraciones y asperezas para automóviles.
Para capitalizar el auge del mercado de NEV en China, la nueva planta contará con líneas de moldeo avanzadas y está previsto que entre en funcionamiento en 2027, con un aumento de capacidad de casi el 70 por ciento.
Como proveedor líder de productos químicos para la industria automotriz, BASF se esfuerza por acelerar el crecimiento empresarial en el sector automotor chino, afirmó Jeffrey Lou, presidente y director de BASF Greater China.
BASF ha realizado importantes inversiones en China desde su entrada en el mercado chino hace 140 años. La expansión de hoy es otra sólida prueba del compromiso de BASF de mantenerse cerca del mercado local y de nuestros clientes, comentó Lou.
Para estrechar los lazos con el ecosistema de vehículos eléctricos de nueva generación de China, algunos fabricantes de automóviles extranjeros están pasando de las tradicionales asociaciones de fabricación a la I+D localizada.
En marzo, la automotriz alemana BMW se asoció con el gigante tecnológico chino Huawei para desarrollar un ecosistema digital para vehículos específico para China, el cual debutará en los modelos eléctricos de última generación de BMW producidos localmente en 2026.
Anteriormente, el gigante automotor japonés Toyota anunció la creación de una nueva empresa en Shanghai para I+D y la producción de vehículos Lexus totalmente eléctricos y baterías, con planes para iniciar la producción en 2027.
La nueva planta representó una inversión significativa para mejorar las capacidades de I+D y producción de Toyota, específicamente adaptadas al sector de vehículos eléctricos en China, el mayor exportador de automóviles del mundo.
En enero, XPENG, fabricante chino de NEV y el gigante alemán Volkswagen anunciaron la firma de un memorando de entendimiento para la colaboración estratégica en una red de carga ultrarrápida en China.
Los expertos del sector creen que la apertura de los consumidores chinos a las nuevas tecnologías y la demanda de conectividad inteligente están abriendo nuevas oportunidades de negocio para las multinacionales.
Los datos oficiales indican que tanto la producción como las ventas de NEV en China superaron los 3 millones de unidades en el primer trimestre de 2025, con un aumento interanual del 50 por ciento en ambos casos.
Se espera que las medidas del país para estimular el consumo, incluidos los programas de canje a gran escala, den un fuerte impulso a la producción y venta de NEV.
"El mercado chino de NEV tiene un enorme potencial, con un entorno empresarial en constante mejora y cadenas industriales y de suministro bien desarrolladas y eficientes", señaló Gao Yuning, vicedecano de la Facultad de Políticas Públicas y Gestión de la Universidad de Tsinghua. "Estas son las razones clave por las que los fabricantes de automóviles extranjeros están aumentando sus inversiones y ampliando su presencia en China", afirmó Gao.