TEHERÁN, 17 mar (Xinhua) -- La reciente reunión en Beijing entre China, Rusia e Irán sobre la cuestión nuclear iraní ha ayudado a sentar las bases para respaldar el Estado de derecho a nivel internacional y promover el multilateralismo, dijo hoy lunes el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Esmaeil Baghaei.
"En la reunión, se sentaron las bases para un proceso constructivo y fructífero para los tres países, así como para apoyar el Estado de derecho a nivel internacional y promover el multilateralismo", señaló Baghaei en una conferencia de prensa semanal.
Al expresar su gratitud a China por organizar la reunión y a Rusia por su participación, Baghaei afirmó que estas reuniones continuarán en el futuro.
China siempre desempeña un papel "constructivo y contributivo" como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU y como parte de los procesos de negociación relativos a la cuestión nuclear iraní, añadió.
El viernes, los viceministros de Relaciones Exteriores de China, Rusia e Irán celebraron una reunión en Beijing en un nuevo intento para reforzar la comunicación y allanar el camino para la reanudación de las conversaciones sobre la cuestión nuclear iraní.
En un comunicado conjunto emitido después de la reunión, los tres países subrayaron la necesidad de poner fin a todas las sanciones unilaterales ilegales, y reiteraron que el compromiso político y diplomático, así como el diálogo basado en el principio de respeto mutuo, siguen siendo la única opción viable y práctica.
China y Rusia dieron la bienvenida a la reiteración de Irán de que su programa nuclear tiene exclusivamente propósitos pacíficos y que no tiene el objetivo de desarrollar armas nucleares, e igualmente dieron la bienvenida al compromiso de Irán del total cumplimiento de sus obligaciones como parte del Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares (NPT, siglas en inglés) y del Acuerdo de Salvaguardias Amplias, apoyaron la política de Irán de continuar su cooperación con el Organismo Internacional de Energía Atómica, y subrayaron la necesidad de respetar por completo el derecho de Irán al uso pacífico de la energía nuclear como un Estado Parte del NPT.
En julio de 2015, Irán firmó un acuerdo nuclear, conocido formalmente como el Plan de Acción Integral Conjunto, con seis países: Reino Unido, China, Francia, Alemania, Rusia y Estados Unidos, en el que aceptó restricciones a su programa nuclear a cambio del alivio de las sanciones.
Sin embargo, durante el primer mandato del presidente estadounidense, Donald Trump, Estados Unidos se retiró del acuerdo en mayo de 2018 y restableció las sanciones contra Irán, lo que provocó que éste redujera la escala de algunos de sus compromisos nucleares.