BUENOS AIRES, 9 mar (Xinhua) -- Tras cumplir los objetivos de desarrollo económico y social durante el año pasado, la economía china sigue siendo un actor clave en la dinámica global, con un impacto significativo tanto en su comercio exterior como en su capacidad para integrar nuevas tecnologías en sectores tradicionales y emergentes, sostuvo el sinólogo argentino Gustavo Girado.
En una entrevista reciente con Xinhua, Girado, director de la carrera de Especialización en Estudios de China Contemporánea de la Universidad Nacional de Lanús, evaluó el desempeño económico de China calificándolo de "extraordinario" y asegurando que sigue siendo "promisorio" pese a un escenario global convulso.
"La respuesta macroeconómica de China ha sido sencillamente extraordinaria porque se alcanzaron los objetivos planificados a pesar de la gran cantidad de turbulencias a nivel internacional, y de las fuertes restricciones que enfrentan las corporaciones chinas para desplegarse sobre los mercados del hemisferio norte-occidental", indicó.
El también director del Centro de Estudios de Investigaciones Sino-Latinoamericano añadió que la economía china "termina teniendo un comportamiento más que interesante y muy promisorio, especialmente en el campo del comercio exterior, donde ha batido todos sus propios récords".
Una de las claves del desarrollo chino es su modelo económico, que combina las fuerzas del mercado y la orientación del Gobierno. Según Girado, este enfoque busca un equilibrio donde el capital privado puede crecer dentro de un marco regulatorio establecido por el Gobierno central.
"La aparición de 'DeepSeek', por ejemplo, en inteligencia artificial o el progreso en la suplantación de los semiconductores a los cuales las empresas chinas de tecnología no pueden acceder, demuestra que esas regulaciones han sido positivas para el desarrollo del capital privado".
En estos mismos ambientes, el analista destacó las reuniones que el Gobierno chino ha sostenido con representantes de las corporaciones de China, lo que "demuestra que no solamente pueden trabajar juntos, sino que deben trabajar juntos", precisó.
El economista también destacó la fuerte apuesta de China a sectores estratégicos que abarcan desde las industrias tradicionales hasta las emergentes, al considerar que está viviendo una transformación en su economía con un auge de la innovación.
"Naturalmente como una economía que madura, cada vez sus tasas de crecimiento van a ser menores y es difícil que vuelvan a ser de dos dígitos, pero eso no impide que aparezcan nuevas tecnologías y nuevos desarrollos", apuntó.
Girado consideró que la clave del futuro económico de China radica en su capacidad de integrar tecnologías avanzadas con sectores productivos más tradicionales y estar a la vanguardia en el desarrollo de nuevas tecnologías, lo que le permite tener un peso importante en la discusión sobre las normas globales en sectores como la manufactura de alta precisión.
"La economía china apuesta mucho a las nuevas tecnologías y las imbrica muy bien con las viejas. Esto es, el desarrollo de la manufactura habitual, a la cual China nos tiene acostumbrados, se vincula con mucha calidad y mucha precisión, con nuevas tecnologías que China está desarrollando aceleradamente", dijo.
Acotó que "los estándares, los patrones y las normas para el funcionamiento global de estas tecnologías de alta precisión todavía no están escritos, y China está en la vanguardia para poder discutir a nivel global cuáles son los estándares que van a fijar el funcionamiento de las tecnologías más modernas y que van a regir la vida en sociedad durante este siglo".
Por otra parte, Girado expresó que en medio de un escenario económico global marcado por el auge de políticas proteccionistas, el rol de China es relevante ante un aumento de la imposición de aranceles y restricciones comerciales que podrían tener un impacto profundo en la economía global.
En este contexto, China ha respondido con rapidez y estrategia, adaptándose a las circunstancias y protegiendo tanto su economía como el equilibrio del comercio mundial, concluyó Girado.
