TAIPEI, 13 sep (Xinhua) -- Una coalición de docenas de grupos políticos y civiles de Taiwan expresó su enérgica condena a ciertos políticos estadounidenses y separatistas locales de la "independencia de Taiwan", quienes distorsionan la Resolución 2758 de la Asamblea General de las Naciones Unidas (UNGA, siglas en inglés), adoptada en 1971.
En una declaración, criticaron la falsa afirmación de políticos de Estados Unidos y separatistas locales de la "independencia de Taiwan", en el sentido de que la resolución no se aplica a la isla, lo que, según sostienen, es un intento de socavar internacionalmente el principio de una sola China.
Tanto la Declaración de El Cairo, en 1943, como la Proclamación de Potsdam, firmada en 1945, reafirmaron la soberanía china sobre Taiwan, en virtud del derecho internacional, de acuerdo con la declaración.
Dado que Taiwan forma parte de China, la resolución 2758 de la UNGA, al abordar la cuestión de la representación del país asiático en las Naciones Unidas, se aplicó intrínsecamente a la isla.
El objetivo de que Taiwan se incorpore a las Naciones Unidas no es más que un pretexto para defender la "independencia de Taiwan" y viola directamente el derecho internacional, señala el documento.
Este continúa afirmando que ambos lados del estrecho de Taiwan pertenecen al mismo país y, como tales, deben buscar la reunificación nacional completa.
Taiwan no debe ser utilizado como peón por Estados Unidos para obstaculizar el desarrollo de la parte continental, ni debe ser fuente de hostilidad o de confrontación entre las dos partes. Por el contrario, hay que esforzarse por promover el diálogo y los intercambios entre los pueblos a través del Estrecho, añade.
Igualmente, hace un llamamiento a todos los sectores de la sociedad taiwanesa para que defiendan el principio de una sola China y luchen por la paz a ambos lados del Estrecho, subrayando la necesidad de oponerse a la injerencia externa en los asuntos a través del Estrecho, así como a las actividades separatistas de la "independencia de Taiwan".
"Queremos la paz, no la guerra. No debemos permitir que las relaciones a través del Estrecho permanezcan en constante oposición", indica la declaración.