MADRID, 21 jul (Xinhua) -- A través de una tecnología centrada en el uso de sensores de movimiento 3D, una investigadora china ha evaluado, en un estudio universitario realizado en España, la técnica del baile flamenco de forma que se puedan desarrollar modelos de entrenamiento que minimicen el riesgo de lesiones.
La investigación se centró, en concreto, en el zapateado, en el que los bailarines ("bailaores" y "bailaoras") utilizan el talón o la punta del pie para crear ritmos y sonidos y servir, de este modo, como un instrumento de percusión más.
"Me centré en investigar problemas comunes de lesiones y dolor en la danza, como las vibraciones generadas por los pasos de baile en diferentes partes del cuerpo, la capacidad de equilibrio de las extremidades inferiores, la simetría bilateral de las piernas y la movilidad del tobillo", explicó a Xinhua la investigadora Zhang Ningyi.
Nacida en Lanzhou, capital de la provincia noroccidental china de Gansu, Zhang es graduada en Educación Física y Entrenamiento por la Universidad de Deportes de Beijing, con especialidad en danza deportiva, y se ha doctorado en España en baile flamenco.
Se trata de una danza muy exigente físicamente que ocasiona en sus bailarines lesiones recurrentes por sobrecargas y dolores en zonas articulares como la lumbar, rodillas y pies con patologías específicas y deformaciones.
En el estudio, se colocaron acelerómetros en diferentes partes del cuerpo, se midió el rango de movimiento activo del tobillo utilizado y se estudió la capacidad de equilibrio y la asimetría.
A través de la investigación, los planes de entrenamiento y la vigilancia de lesiones podrán optimizarse de acuerdo con la destreza técnica de los bailaores y bailaoras, con el fin de reducir el riesgo de lesiones.
Zhang se sumergió en el mundo de la danza flamenca en 2008 durante un intercambio entre su universidad y la Universidad Europea de Madrid, en un momento en que comenzó no solo a estudiarla, sino también a practicarla.
"Durante este proceso de interacción con mis instructores y colegas, identifiqué ciertos problemas que despertaron mi interés en explorarlos desde una perspectiva de biomecánica del movimiento", relató.
Ahora desea que sus hallazgos no solo colaboren al entrenamiento de bailarines de flamenco y profesionales relacionados, sino también que "generen mayor atención hacia la ciencia del cuidado de la salud".
El flamenco, patrimonio cultural inmaterial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), combina música vocal, el arte de la danza y el acompañamiento musical, denominados, respectivamente, cante, baile y toque.
Nacida de la mezcla de culturas que han habitado el país a lo largo de los siglos, esta expresión artística se ha nutrido también de los vínculos entre Oriente y Occidente a través de las antiguas rutas comerciales.
Es el caso, por ejemplo, del mantón flamenco, conocido también como "mantón de Manila" aunque su origen está en China, desde donde era embarcado a Filipinas, cuando esta era colonia española, y luego enviado a España a través de la antigua Ruta Marítima de la Seda.
"Cada vez más personas en China están mostrando interés en el flamenco, que fusiona elementos históricos, culturales y artísticos, entre otros, y a mí me gustaría contribuir a seguir difundiéndolo" y fortalecer "el intercambio de arte popular entre ambos lados", subrayó Zhang.
