BEIJING, 24 jun (Xinhua) -- En la búsqueda de un desarrollo de alta calidad por parte de China, el concepto "nuevas fuerzas productivas de calidad" está acaparando la atención y señalando la dirección para la transformación y la modernización de la segunda economía más grande del mundo.
¿Cuáles son los elementos fundamentales de las "nuevas fuerzas productivas de calidad"? ¿Cómo deberían desarrollarse y cuáles son las implicaciones para el resto del mundo? En la sexta edición de la Mesa Redonda Económica de China, una plataforma de diálogo para todos los medios de comunicación organizada por la Agencia de Noticias Xinhua, funcionarios del gobierno y expertos de la industria compartieron sus puntos de vista sobre algunas de las preguntas más frecuentes acerca de esta, la frase de moda.
INNOVACIÓN EN EL CENTRO
Introducidas por primera vez en 2023, las nuevas fuerzas productivas de calidad se refieren a la productividad avanzada, liberada del modo tradicional de crecimiento económico y de las vías tradicionales de desarrollo de la productividad. Cuenta con alta tecnología, alta eficiencia y alta calidad, y está en línea con la nueva filosofía de desarrollo.
La nueva estrategia se produce en medio del impulso chino por el desarrollo de alta calidad y la creciente ola de nueva revolución científica y transformación industrial, según Liu Dongmei, secretaria del Partido de la Academia de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo de China.
"La innovación científica y tecnológica es el núcleo de las nuevas fuerzas productivas de calidad", afirmó Liu y señaló que a través de esta innovación, especialmente en tecnologías revolucionarias y disruptivas, se puede proporcionar un nuevo impulso de crecimiento para el desarrollo económico.
La fortaleza general de China en innovación científica y tecnológica ha mejorado constantemente en los últimos años, y el gasto en investigación y desarrollo del país superó los 3,3 billones de yuanes (unos 463.500 millones de dólares) en 2023, un aumento del 8,1 por ciento interanual.
Huang Hanquan, presidente de la Academia China de Investigación Macroeconómica, afiliada a la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, comentó que el desarrollo de las nuevas fuerzas productivas de calidad abarca tanto las industrias emergentes como las tradicionales, y que la innovación involucra tecnologías, así como instituciones y gestión.
"Las innovaciones de la ciencia y la tecnología y las institucionales son como dos ruedas que impulsan el crecimiento de la productividad total de los factores en China", manifestó Huang en la mesa redonda.
Qianhai en Shenzhen, el centro tecnológico del sur de China, una moderna zona de demostración de la industria de servicios, ha dado ejemplo en el desarrollo de las nuevas fuerzas productivas de calidad a través de innovaciones tecnológicas e institucionales.
Wang Jinxia, subdirector de la autoridad de Qianhai, resaltó que las autoridades locales se centraron en fomentar un conglomerado industrial para la inteligencia artificial, la protección de la propiedad intelectual, el fortalecimiento del apoyo financiero y la construcción de grandes plataformas para el desarrollo industrial.
Hoy en día, existen alrededor de 55.000 firmas tecnológicas en Qianhai, de las cuales 2.239 son empresas nacionales de alta tecnología, y 14 son compañías unicornio o emergentes valoradas en más de 1.000 millones de dólares, de acuerdo con Wang.
ORIENTAR REFORMAS FUTURAS
La nueva estrategia ha trazado un camino claro para el desarrollo de alta calidad y las reformas relevantes, ya que China se esfuerza por eliminar los cuellos de botella que impiden el desarrollo de las nuevas fuerzas productivas de calidad, evaluaron los panelistas.
Las reformas institucionales en el campo de la ciencia y la tecnología implican esencialmente la formación de nuevas relaciones de producción que estén en línea con dichas fuerzas, dijo Liu.
Liu agregó que un aspecto crucial de estas reformas radica en la coordinación interdepartamental en términos de formulación de estrategias, asignación de recursos y distribución de instalaciones importantes para maximizar la eficiencia de la utilización de los recursos.
Haciéndose eco de los puntos de vista de Liu, Huang expresó que las reformas institucionales deberían ser multifacéticas e integrales, facilitando así el flujo sin problemas de factores de alta calidad como capital, datos y talento hacia fuerzas productivas de alta calidad.
Huang también subrayó la necesidad de reformar el sistema científico y tecnológico para fomentar las aportaciones a la investigación básica con el fin de obtener logros más originales y disruptivos, y para reformar los servicios a fin de acelerar la aplicación de los avances tecnológicos, transformándolos en productividad tangible.
En particular, tanto Huang como Liu destacaron el papel de la gestión del talento en el impulso de la innovación tecnológica.
Es necesario hacer esfuerzos para crear un entorno más propicio para la innovación, con el fin de atraer más talentos a trabajar y vivir en China, reformar el sistema educativo con miras a nutrir a más futuros científicos, maestros e ingenieros, y mejorar los sistemas de evaluación para fomentar la investigación básica a largo plazo, sostuvo Liu.
BENEFICIOS GLOBALES
Los esfuerzos en curso de China para fomentar nuevas fuerzas productivas de calidad inyectarán un nuevo impulso al crecimiento económico mundial y proporcionarán enormes oportunidades para los inversores, de acuerdo con los panelistas y otros expertos de la industria presentes en la mesa redonda.
"Junto con las empresas chinas, los inversores globales están aprovechando una nueva ronda de oportunidades que surgen del desarrollo de nuevas fuerzas productivas de calidad", indicó Wang, de la autoridad de Qianhai.
Los inversionistas globales también podrán trabajar con China para impulsar la explosión de la nueva revolución tecnológica, y participar en la última ola de globalización, indicó, y agregó que las empresas extranjeras ya han invertido más de 40.000 millones de dólares en Qianhai.
El desarrollo de las nuevas fuerzas productivas de calidad de China puede tener impactos significativos en la economía global, influyendo en la innovación y la competitividad en diversos sectores e industrias, afirmó Ronnie Lins, director del Centro de Investigación y Negocios China-Brasil.
Impulsada por el firme enfoque de China en innovación, la inversión extranjera directa en los sectores manufactureros de alta tecnología del país alcanzó los 37.760 millones de yuanes (unos 5.300 millones de dólares) durante el primer trimestre de este año, según mostraron datos oficiales.
Mientras China continúa cultivando nuevas fuerzas productivas de calidad, el país también está compartiendo sus tecnologías inteligentes, ecológicas e inclusivas con otros países, señaló Liu de la Academia de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo de China.
El mundo se está enfrentando a varios desafíos mundiales apremiantes, que abarcan la seguridad alimentaria, los desastres naturales y el cambio climático. China, con su rica experiencia, tiene mucho que ofrecer para abordar estos temas, afirmó.
"Soy muy optimista de que estas nuevas fuerzas productivas de alta calidad y de alta tecnología serían un gran paso adelante para la humanidad, pueden generar productos mucho mejores y de menor costo. Y podemos hacerlo de una manera mucho más respetuosa con el medio ambiente", manifestó Erik Solheim, copresidente del Centro Europa-Asia y ex secretario general adjunto de las Naciones Unidas.
