MADRID, 7 may (Xinhua) -- Las exploraciones de un grupo de artistas contemporáneos chinos, en el contexto de la "globalización cultural" y con base en la cosmología tradicional china, se exhiben estos días en la capital española, Madrid, en la exposición multidisciplinar "Fluyendo naturalmente".
En la muestra, que presenta 29 pinturas, esculturas e instalaciones multimedia, el equipo curatorial ha pretendido captar, partiendo del pensamiento clásico chino, cómo en el contexto de la "globalización cultural" esos artistas "deconstruyen y reconstruyen lo tradicional" para seguir el orden natural y adaptarse al desarrollo de los tiempos.
"El concepto de naturaleza en chino se refiere al conjunto que engloba tanto la humanidad como el entorno en que vivimos. En la cultura china siempre hemos mirado este concepto de humanidad y medio ambiente como un conjunto, no como dos elementos separados o enfrentados", explicó a Xinhua Lu Zhengyuan, uno de los comisarios y artistas de la muestra.
De este modo, "la integración de la humanidad en la naturaleza forma parte de la filosofía tradicional china y es lo que queremos relatar con este título", pues la idea de fluir naturalmente "quiere decir que seguimos el ritmo, el orden de la naturaleza, para adaptarnos al desarrollo de los tiempos".
Comisariada por Lu, nacido en 1982 y docente en la Academia Central de Bellas Artes de China, y por Anne Tom Wong, fundadora de la organización "Emerging Young Artists", con sede en Toronto (Canadá), la exposición presenta obras de 22 destacados artistas del país asiático y se puede ver hasta el 31 de mayo en el Centro Cultural Chino de Madrid.
"Según la cultura china, hay tres niveles para comprender el mundo: primero, vemos las montañas como montañas, vemos la realidad como es; segundo vemos la no montaña en las montañas, es decir, algo más allá de la apariencia, y tercero, volvemos a ver las montañas en las montañas después de haber entendido el trasfondo de la apariencia", dijo Lu.
Por eso se han escogido "obras más realistas, otras que son una interpretación más abstracta, y otras que van más allá, que aunque aparentemente reflejan la simple naturaleza, en el fondo son una manifestación de cómo debemos afrontar y ver la vida".
Entre los artistas, Zhen Wei, nacido en 1968 y profesor en la Universidad Normal de Beijing, presenta dos pinturas sobre tinta que explicó en conversación con Xinhua.
"La tinta y el papel de arroz eran nuestras herramientas de comunicación básicas, como el móvil hoy en día. Pero hoy ya no, solamente las vemos en obras de arte. Entonces para los chinos nos resultan muy cercanas porque hemos convivido con ellas muchos años, pero al mismo tiempo nos resultan distantes porque ya están caducadas", explicó.
"Esta mezcla de sensaciones es quizás una expresión de rechazo a esa explosión de información que nos absorbe, una incógnita de si nos enriquece o si nos empobrece", reflexionó.
En una de sus obras, "Civilización que se desvanece continuamente", expone, a través de la composición en celdas, que "aunque hay una conexión con las personas que nos rodean, muchas veces no nos entendemos y nos sentimos solos".
Además, revela el entrelazamiento actual "en el nivel de los signos, de la comunicación".
"Tradicionalmente, en el arte chino, la caligrafía y la pintura son un todo. Podemos pintar con letras y también podemos escribir poemas con imágenes. En el mundo digitalizado en que vivimos estamos muchas veces enviando emojis con un mensaje detrás, así que estamos también mezclando constantemente estos signos de comunicación", apuntó.
Otra de las artistas, Kang Lei, nacida en 1975 y también docente en la Academia Central de Bellas Artes de China, señaló que siempre le ha gustado conocer diferentes culturas, viajar a distintos lugares del mundo y "observar cómo la geografía influye sobre la personalidad y el carácter de cada pueblo".
En el caso de las "Crónicas de la India", que presenta en la exhibición, refleja "la potente conexión entre los seres humanos y lo que entendemos como poder sobrenatural, esa creencia religiosa que está presente en la vida cotidiana en el país y deja una enorme impresión".
Las obras expuestas, explicó a Xinhua, "tienen como colores principales el rojo y el verde, y a los hombres y mujeres como protagonistas. También eso fue un poco lo que me chocó porque estos dos grupos tienen muy marcados sus papeles en la sociedad india".
El comisario Lu resaltó que con la exposición se quiere "mostrar un contenido lo más variado posible tanto en términos de formato como en el sentimiento de los autores, de diferentes generaciones y con distintas formaciones y experiencias".
"Lo que trato de mostrar es, en primer lugar, que el arte contemporáneo chino es bastante multifacético. Y, por el otro, queremos proponer un diálogo con el resto del mundo. Esto es para mí lo más importante, la posibilidad de comunicación que propone", concluyó.
