LIMA, 6 abr (Xinhua) -- El Gobierno de Perú llamó este sábado a los Gobiernos de Ecuador y México a que resuelvan sus diferencias mediante el diálogo, con el fin de superar el "impasse" que surgió tras el allanamiento policial a la sede diplomática en Quito para detener al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas.
"Al lamentar la situación generada entre Ecuador y México, el Perú hace un llamado a sus Gobiernos para que superen este 'impasse' y resuelvan sus diferencias a través del diálogo, conforme a los mandatos del derecho internacional y al espíritu de integración latinoamericano", indicó la cancillería peruana en un comunicado.
Agregó que conforme a su invariable compromiso con el respeto a los principios y normas del derecho internacional y a la solución pacífica de las controversias, "rechaza toda transgresión a las normas de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961 que garantizan los procedimientos de buena convivencia entre los Estados".
Consideró que "el estricto apego" al derecho diplomático, así como el cumplimiento de las obligaciones establecidas en los tratados internacionales, resultan fundamentales para la convivencia pacífica entre los Estados.
"Ello incluye el respeto y correcta ejecución de la normativa internacional sobre asilo diplomático por los Estados concernidos", añadió.
La Policía ecuatoriana irrumpió la noche del viernes en la Embajada de México en Quito para detener al exvicepresidente Glas, quien se refugiaba en esa sede desde el pasado 17 de diciembre para evadir cargos por presunto peculado.
Tras rechazar el asilo otorgado por la administración mexicana al exfuncionario, el Gobierno de Ecuador sostuvo que "ningún delincuente puede ser considerado perseguido político" y que, luego de su detención, sería "puesto a órdenes de las autoridades competentes".
La detención de Glas se produjo durante una incursión con vehículos blindados del Bloque de Seguridad de Ecuador, conformado por la Policía y las Fuerzas Armadas, a la Embajada de México en la capital ecuatoriana.
Tras conocer sobre el ingreso no autorizado, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, señaló que se trata de "una violación flagrante al derecho internacional y a la soberanía de México", que decidió finalmente romper relaciones diplomáticas con Ecuador. Fin