Por Pau Ramírez
RÍO DE JANEIRO, 21 nov (Xinhua) -- Brasil quiere ser un articulador en el mundo para trabajar y avanzar en la lucha contra el cambio climático y evitar los impactos adversos que está causando la transformación del clima, afirmó la ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático, Marina Silva.
En una entrevista concedida el lunes a corresponsales extranjeros, entre ellos los de Xinhua, Silva dejó claro que Brasil quiere ejercer un liderazgo mundial en la lucha contra el cambio climático y la defensa del medio ambiente.
"Brasil continuará trabajando, articulando en nuestro continente y fuera de él, dentro del G7, de los BASIC, de los BRICS y en todos los espacios multilaterales para hacer avanzar la agenda de enfrentamiento contra el cambio climático y evitar los efectos dramáticos tanto en la vida de las personas como en las otras formas de vida, en los sistemas económicos, sociales y culturales", comentó.
Brasil participará activamente en la próxima 28ª sesión de la Conferencia de las Partes (COP28) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que se celebrará entre el 30 de noviembre y el 12 de diciembre en Dubái, Emiratos Árabes Unidos, y donde podrá exponer su plan de transformación ecológica, impulsado entre todos los ministerios del Gobierno.
El país sudamericano, además, será la sede en 2025 de la COP30.
"Llegamos a la COP28 con resultados muy importantes (...) Llegar a la COP28 con el plan de transformación ecológica ya en pleno desarrollo, liderado por el propio ministro de Hacienda (Fernando Haddad) con la participación de todos los sectores del Gobierno", explicó Silva.
La ministra alertó de los peligros que puede causar para el planeta si la subida de la temperatura aumenta en 1,5 grados Celsius, como apuntan los científicos, y sugirió que los países más ricos ayuden a los más pobres a poder alcanzar y superar sus metas climáticas.
"Sugeriremos en la COP28, junto con otros países, una especie de corredor de velocidad donde los países que puedan ir más rápido puedan hacerlo. Brasil está trabajando en una iniciativa para acelerar este proceso en la que los países desarrollados puedan asociarse con los países en desarrollo que quieran acelerar sus procesos de transición", comentó.
Silva apuntó que Brasil quiere acelerar el proceso de transición energética en el mundo, pidiendo más esfuerzo a todos los países.
"Estamos comprometidos en asegurar que lleguemos a la COP30 en línea con lo que Brasil y el mundo necesitan y este es un esfuerzo multilateral que no puede ser pospuesto. Y tienen que tener un compromiso firme con la agenda de una transición justa, para que no se cargue con la misma intensidad a los que han contribuido menos al problema y se les ayude", dijo.
Silva también valoró positivamente los primeros once meses del Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, tiempo en el que Brasil logró reducir de forma significativa la deforestación en la Amazonía.
"Reducimos en un 49,5 por ciento la deforestación, y con esto hemos evitado liberar a la atmósfera unos 250 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) en los últimos diez meses", agregó la ministra brasileña, quien expuso el regreso de su país en el panorama mundial del medio ambiente.
A sus ojos, uno de los objetivos del Gobierno actual es que "Brasil se haya convertido en un gran exportador de sostenibilidad".
"Tenemos todas las condiciones para hacerlo", concluyó.