Imagen proveída por la Agencia de Noticias de Chile AGENCIAUNO del 4 de febrero de 2023 de residentes limpiando escombros después de un incendio forestal, en Tomé, región del Biobío, Chile. (Xinhua/Agencia UNO)
SANTIAGO, 8 feb (Xinhua) -- Chile recibió hoy miércoles un contingente de 27 especialistas procedentes de Colombia que colaborarán en los trabajos de extinción de los incendios forestales, los cuales desde la semana anterior afectan a la zona centro-sur del país y que han provocado la destrucción de casi 300.000 hectáreas.
"El apoyo internacional que seguimos recibiendo nos llena los corazones de fuerza para continuar trabajando y de esperanza para que salgamos unidos de esto", expresó el canciller en funciones, José Miguel Ahumada.
El grupo colombiano arribó a Chile la madrugada de este miércoles a bordo de un avión de la Fuerza Aérea colombiana.
El contingente está integrado por 20 bomberos, cuatro unidades policiales para equipo de telecomunicaciones, dos profesionales en atención médica y un jefe de misión para coordinación, además de material químico.
Ahumada señaló que la ayuda se suma a los aportes recibidos de otros países como Argentina, España y México, entre otros, después de que la cancillería chilena emitió el pasado fin de semana una solicitud de apoyo internacional para sobrellevar la catástrofe.
Chile combate desde la semana anterior una serie de incendios forestales que azotan de manera grave localidades rurales de la zona centro-sur del país sudamericano, en medio de una ola de calor con temperaturas extremas que alcanzaron los 40 grados Celsius.
Las autoridades chilenas han decretado estado de catástrofe y alerta roja en las regiones de Ñuble, Biobío y La Araucanía, a causa de las intensas llamas que se propagan por los fuertes vientos y se agravan por la baja humedad.
En Chile se han reportado hasta el momento 24 personas fallecidas a causa de la emergencia, además de centenares de heridos y damnificados cuyas viviendas han quedado destruidas.
Los incendios registrados en esta temporada estival han provocado cortes de rutas y de suministros básicos, así como la evacuación de zonas pobladas, muchas de ellas dedicadas a la ganadería, la agricultura y el negocio forestal.
