Con base en afinidades y fortalezas, España y México están decididos a profundizar y diversificar sus intercambios, así como consolidarse como actores con responsabilidad global.
El rey Felipe VI señaló por su parte que la relación mexicano- española es de una importancia capital, porque se ha ido formando a lo largo de una experiencia histórica y cultural muy amplia, basada en vínculos mucho más profundos que los políticos y comerciales.
Son relaciones entre personas que trascienden gobiernos e instituciones, y eso las hace aun más sólidas, dijo.