De acuerdo con la corte, Ni aceptó dinero en efectivo, piedras preciosas y colecciones artísticas por un valor de casi 13 millones de yuanes de ejecutivos de nueve compañías en 49 ocasiones entre 2000 y 2012. El acusado no pudo explicar la fuente de los ingresos de la familia valorados en 5,78 millones de yuanes.
Ni se aprovechó de su puesto para beneficiar a grupos involucrados en los sectores inmobiliario, minero y otros. El condenado supuestamente ofreció a estas firmas ayuda para la planificación de proyectos, demolición de viviendas y reubicación para el desarrollo de tierras.