EL CAIRO, 14 jul (Xinhua) -- El presidente egipcio Abdel-Fattah al-Sisi indicó hoy que la nueva iniciativa de ley antiterrorista no busca oprimir al pueblo o limitar las libertades, informó la televisión estatal.

"El Estado debe ser protegido en su gran desafío, en un momento en el que buscamos triunfar y sobrevivir y ellos no quieren esto para nosotros", dijo Al-Sisi a los asistentes a una ceremonia de interrupción del ayuno, en referencia a los terroristas que han estado perpetrando letales ataques desde la destitución del ex presidente islamista Mohamed Morsi a mediados de 2013.

La nueva iniciativa de ley antiterrorista recientemente aprobada por el gabinete egipcio ha suscitado debates en el país árabe más populoso y ha generado preocupación en relación con las libertades y los derechos humanos.

La ley busca encarcelar a cualquier persona que publique noticias que difieran de las declaraciones oficiales sobre las actividades terroristas y otorga a la policía la libertad de utilizar la fuerza contra los sospechosos si sienten peligro.

La iniciativa fue propuesta luego del asesinato a fines de junio del máximo fiscal del país en un ataque con auto bomba y tras los letales ataques terroristas perpetrados a inicios de julio contra varios puestos de vigilancia en la provincia de Sinaí del Norte, los cuales dejaron 17 soldados muertos.

Las incursiones militares contra los militantes en la península han dejado alrededor de 250 muertos desde entonces.

Algunos defienden la nueva iniciativa y dicen que es necesaria para la seguridad nacional y para la excepcional "guerra contra el terrorismo" del país, mientras que otros consideran que la iniciativa representa una violación de la nueva Constitución y va en contra de los estándares de la libertad de prensa.

"La Constitución de Egipto es ambiciosa y maravillosa, pero necesitamos más tiempo para lograr más efectividad", dijo el presidente egipcio, quien añadió que el país está atravesando circunstancias difíciles y desafíos masivos.

Al-Sisi tiene temporalmente la autoridad legislativa por la falta de un Parlamento, el cual será elegido este año.

Al-Sisi negó que esté tergiversando la ley o utilizándola como una herramienta y enfatizó que "el terrorismo no tiene religión ni patria".