LA PAZ, 30 dic (Xinhua) -- El Gobierno de Bolivia anunció este martes el retorno al régimen de precios variables para los derivados del petróleo, una política que no se aplicaba desde hace 28 años y que marca un giro estructural en la gestión de combustibles, en un contexto de caída de ingresos por exportación de gas y aumento sostenido de las importaciones de diésel.
El anuncio fue realizado por el ministro de Hidrocarburos, Mauricio Medinaceli, durante una conferencia de prensa en la ciudad de Santa Cruz (este), donde explicó los alcances del Título VI del Decreto Supremo 5503, dedicado a la "Estabilización de precios, combustibles y energía".
Según el ministro, la medida busca asegurar el abastecimiento interno, reducir las filas en estaciones de servicio, preservar la estabilidad macroeconómica y ordenar el consumo.
"El objetivo del decreto es claro: garantizar abastecimiento y estabilidad", afirmó Medinaceli, quien precisó que la norma incorpora una metodología técnica para la formación de precios y no responde únicamente a un ajuste impositivo.
Subrayó que el nuevo esquema introduce referencias de mercado y márgenes definidos, además de un rediseño en la relación contractual entre la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y los productores.
Medinaceli añadió que el retorno al régimen de precios variables también tendrá un impacto positivo en la recaudación del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), lo que permitiría mayores transferencias a gobernaciones, municipios y universidades públicas.
El titular de Hidrocarburos justificó la medida al señalar que el esquema de precios congelados se volvió insostenible. "La caída de los precios y de las exportaciones de gas volvió insostenible el esquema de subsidios, mientras las importaciones de diésel crecían de forma acelerada", advirtió.












