El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva (c), asiste a la inauguración de la nueva planta de vehículos eléctricos e híbridos de la china BYD Brasil, en Camacari, en el estado de Bahía, Brasil, el 9 de octubre de 2025. La ceremonia marcó el inicio de la producción brasileña y consolida al país sudamericano como un polo estratégico de la compañía para América Latina.. (Xinhua/Lucio Tavora)
BRASILIA, 9 oct (Xinhua) -- El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, inauguró este jueves la nueva planta de vehículos eléctricos e híbridos de la china BYD Brasil en Camaçari, estado de Bahía (noreste).
La ceremonia marcó el inicio de la producción brasileña y consolida al país sudamericano como un polo estratégico de la compañía para América Latina.
La inauguración de la planta contó con la presencia del vicepresidente y ministro de Desarrollo, Industria, Comercio y Servicios, Geraldo Alckmin, del ministro de la Casa Civil (jefe de Gabinete), Rui Costa, y del embajador de China en Brasil, Zhu Qingqiao.
También participaron el presidente de BYD, Wang Chuanfu, el gobernador de Bahía, Jerónimo Rodrigues, el alcalde de Camaçari, Luiz Carlos Caetano, y otras autoridades.
En su discurso en la planta de BYD, el mandatario destacó las metas de producción de automóviles en Bahía, "porque no quieren vender coches solo en Brasil".
"Aquí estamos tratando de presentar al mundo un proyecto de nación. No tenemos preferencia por países, lo que queremos es establecer una relación civilizada con el mundo", dijo el mandatario en defensa del multilateralismo y de la amistad entre las naciones.
"No queremos dejar de exportar 'commodities' (materias primas), sino que queremos exportar inteligencia, queremos exportar conocimiento, queremos exportar valor agregado, y por eso vamos a seguir fortaleciendo nuestra relación con China", afirmó.
Por su parte, el embajador chino Zhu Qingqiao agradeció al presidente Lula da Silva por su visión estratégica, gracias a lo cual la asociación China-Brasil ha avanzado con vigor.
"La cooperación entre China y Brasil en el campo de las energías limpias es una de las mayores, y un elemento fundamental de la sinergia entre las estrategias de desarrollo de los dos países", destacó.
Proyectado para ser el complejo industrial más grande de la empresa fuera de Asia, el emprendimiento recibió inversiones de 5.500 millones de reales (unos 1.000 millones de dólares). La nueva planta en Camaçari tiene una capacidad inicial para producir 150.000 vehículos al año y 300.000 en una segunda etapa. BYD es el mayor fabricante de vehículos eléctricos e híbridos del mundo.
Desde principios de octubre, 350 trabajadores han sido contratados, con la previsión de alcanzar 1.8000 a finales de mes y 2.000 en las semanas siguientes. Cuando esté en pleno funcionamiento, el complejo tendrá el potencial de generar 20.000 empleos, entre directos e indirectos, incluyendo empleados, prestadores de servicios y proveedores.
Con un área de 4,6 millones de metros cuadrados, la planta de Camaçari alberga una de las estructuras de fabricación automotriz más modernas de América Latina. La línea de producción mixta permite la fabricación simultánea de modelos híbridos y 100 por ciento eléctricos.
Durante el evento, se presentará el primer híbrido enchufable "flex" del mundo. El sistema fue diseñado y construido especialmente para Brasil, con una tecnología desarrollada en cooperación entre ingenieros brasileños y chinos, proyectada para funcionar con cualquier proporción de etanol y gasolina.
Alineado con los objetivos de transición energética del país, el complejo obtuvo la certificación internacional I-REC, que certifica que el 100 por ciento de la energía eléctrica consumida proviene de fuentes limpias y renovables. La iniciativa refuerza el compromiso de Brasil con una economía de bajo carbono.
Presente en Brasil desde hace más de una década, BYD tiene otras inversiones en el país sudamericano, con unidades de producción en Campinas (Sao Paulo) y Manaus (Amazonas).
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, habla durante la inauguración de la nueva planta de vehículos eléctricos e híbridos de la china BYD Brasil, en Camacari, en el estado de Bahía, Brasil, el 9 de octubre de 2025. La ceremonia marcó el inicio de la producción brasileña y consolida al país sudamericano como un polo estratégico de la compañía para América Latina.. (Xinhua/Lucio Tavora)
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva (c), el vicepresidente y ministro de Desarrollo, Industria, Comercio y Servicios brasileño, Geraldo Alckmin (i), y el presidente de BYD, Wang Chuanfu (d), reaccionan durante la inauguración de la nueva planta de vehículos eléctricos e híbridos de la china BYD Brasil, en Camacari, en el estado de Bahía, Brasil, el 9 de octubre de 2025. La ceremonia marcó el inicio de la producción brasileña y consolida al país sudamericano como un polo estratégico de la compañía para América Latina. (Xinhua/Lucio Tavora)
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva (c-frente), y el presidente de BYD, Wang Chuanfu (i-frente), caminan durante la inauguración de la nueva planta de vehículos eléctricos e híbridos de la china BYD Brasil, en Camacari, en el estado de Bahía, Brasil, el 9 de octubre de 2025. La ceremonia marcó el inicio de la producción brasileña y consolida al país sudamericano como un polo estratégico de la compañía para América Latina.. (Xinhua/Lucio Tavora)
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva (d), habla junto al presidente de BYD, Wang Chuanfu (i), durante la inauguración de la nueva planta de vehículos eléctricos e híbridos de la china BYD Brasil, en Camacari, en el estado de Bahía, Brasil, el 9 de octubre de 2025. La ceremonia marcó el inicio de la producción brasileña y consolida al país sudamericano como un polo estratégico de la compañía para América Latina. (Xinhua/Lucio Tavora)
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva (c), posa durante la inauguración de la nueva planta de vehículos eléctricos e híbridos de la china BYD Brasil, en Camacari, en el estado de Bahía, Brasil, el 9 de octubre de 2025. La ceremonia marcó el inicio de la producción brasileña y consolida al país sudamericano como un polo estratégico de la compañía para América Latina. (Xinhua/Lucio Tavora)
