JERUSALÉN, 4 sep (Xinhua) -- Un nuevo estudio encontró que las estrellas más masivas del universo primitivo se formaron como sistemas binarios, es decir, surgieron en pares, similar a la manera en la que muchas estrellas masivas se forman en la Vía Láctea, indicó hoy en una declaración la Universidad de Tel Aviv en Israel.
El estudio, dirigido por Tomer Shenar de la Escuela de Física y Astronomía de la Universidad de Tel Aviv; Hugues Sana de la Universidad Católica de Lovaina en Bélgica; y Julia Bodensteiner de la Universidad de Ámsterdam en Países Bajos, fue publicado en Nature Astronomy. El estudio ofrece la primera evidencia sólida de que los pares de estrellas masivas eran comunes en el universo primitivo, y probablemente mucho más comunes que en la actualidad.
Este descubrimiento ayudará a los científicos a entender mejor cómo se forman las galaxias, los agujeros negros y los elementos pesados, añadió la declaración.
Las estrellas masivas son sumamente poderosas, dado que pueden tener 10 o más veces la masa del Sol y emitir más energía que un millón de estrellas como el Sol.
Estas dan forma a las galaxias en las que se encuentran, producen la mayoría de los elementos pesados del universo y finalizan su vida con explosiones de supernovas que dejan detrás estrellas de neutrones o agujeros negros, algunos de los objetos más misteriosos del espacio.
En la Vía Láctea, la mayoría de las estrellas masivas surgen en sistemas binarios. Las estrellas orbitan muy cerca la una de la otra, y en ocasiones intercambian material o incluso llegan a fusionarse. Estas interacciones cambian la manera en la que las estrellas surgen y desaparecen.
Los investigadores deseaban saber si lo mismo era cierto para las estrellas masivas del universo primitivo. Para estudiar esto, utilizaron el Very Large Telescope de Chile para observar 1.000 estrellas masivas en la Pequeña Nube de Magallanes, una galaxia cercana con condiciones químicas muy similares a las del universo primitivo.
Al analizar la luz de las estrellas, el equipo descubrió que al menos 70 por ciento de las estrellas más masivas forman parte de sistemas binarios cerrados.