Por Raúl Menchaca
LA HABANA, 25 abr (Xinhua) -- El Gobierno cubano ratificó la decisión de mantener la cooperación sanitaria internacional, a pesar de las amenazas de Estados Unidos de sancionar a médicos y funcionarios de la isla, así como a las naciones que acojan a los cooperantes cubanos.
"Nosotros no vamos a detener la cooperación aún en medio de las amenazas y la difamación que el Gobierno de Estados Unidos tiene en contra de nuestros colaboradores", subrayó el titular del Ministerio de Salud Pública (Minsap) de Cuba, José Ángel Portal.
El Gobierno de Washington anunció a finales de febrero pasado la ampliación de las sanciones contra las misiones médicas internacionales de Cuba, calificándolas de "trabajo forzado" y al mismo tiempo amenazó con imponer restricciones de visado a funcionarios extranjeros implicados.
Durante más de seis décadas, La Habana ha impulsado programas de cooperación con países del Sur Global para proporcionar atención sanitaria a comunidades marginadas y desatendidas.
Portal reiteró en diálogo con Xinhua la voluntad gubernamental de Cuba por mantener esa ayuda, que dijo tiene un sentido de solidaridad y un compromiso con la salud y la vida de los pueblos.
El ministro cubano destacó el reconocimiento que tienen esas brigadas médicas por parte de los pueblos y los gobiernos que las reciben, aunque comentó que lo más importante es llegar a los lugares más difíciles para "poder seguir salvando vidas".
"Nosotros vamos donde los países no tienen capacidad de llegar y nuestros médicos lo hacen con muchísima solidaridad", subrayó el funcionario cubano, al aclarar que la colaboración se hace a partir de convenios con gobiernos y con clínicas, incluso privadas.
Portal dijo que los médicos cubanos viajan a esas misiones de manera "totalmente voluntaria", sin recibir presiones para incorporarse a brigadas de cooperantes.
Más de 600.000 profesionales cubanos han brindado servicios desde 1963 en 165 países y en la actualidad más de 24.000 colaboradores trabajan en 56 naciones, según datos del Minsap.
Entre las misiones más destacadas de las brigadas están las referidas a enfrentar la epidemia de ébola en África Occidental en 2014, así como la presencia de 54 grupos en 42 países para luchar contra la pandemia de la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19).
Los cooperantes sanitarios cubanos también han estado presentes en diversas naciones para enfrentar efectos de catástrofes naturales, desigualdades sociales relacionadas con la atención sanitaria y múltiples epidemias, entre ellas de malaria, fiebre amarilla, cólera y dengue.
Un pilar central de esa cooperación ha sido el Contingente Henry Reeve creado en 2005 para asistir a los territorios estadounidenses severamente afectados por el huracán Katrina en septiembre de ese año, aunque la ayuda fue rechazada por la Casa Blanca.
En 2017, dicho contingente recibió por esa labor en desastres y en epidemias el Premio de Salud Pública de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Memoria del Dr. Lee Jong-wook, durante la 70 Asamblea Mundial de la Salud.
La primera acción de cooperación médica internacional de Cuba tuvo lugar en mayo de 1960, cuando Chile sufrió un devastador terremoto y el Gobierno de La Habana envió una brigada de emergencia con seis hospitales de campaña.
El inicio oficial de la colaboración médica se considera, no obstante, en mayo de 1963, cuando los cooperantes cubanos ayudaron a conformar el sistema de atención de salud pública en la recién independizada Argelia.