BEIJING, 21 mar (Xinhua) -- Los continuos esfuerzos de China para gestionar las disputas de propiedad intelectual relacionadas con el extranjero sirven como un sólido pilar para la internacionalización de las empresas domésticas y ofrecen una garantía importante para impulsar la apertura de alto nivel del país, según expertos.
De acuerdo con un reportaje publicado por China Daily, las valoraciones de los expertos llegan luego de que el Consejo de Estado, el gabinete de China, presentara el miércoles un reglamento de 18 artículos sobre la resolución de disputas de propiedad intelectual relacionadas con asuntos extranjeros. El reglamento entrará en vigor el 1 de mayo.
"Este es el primer documento administrativo de China que estandariza sistemáticamente la gestión de disputas de propiedad intelectual relacionadas con el extranjero, lo cual resulta de gran importancia orientativa", declaró Liu Bin, abogado especializado en propiedad intelectual de la firma Beijing Zhong Wen.
Liu elogió el reglamento por fortalecer los servicios de consulta y alerta sobre la información relacionada con la propiedad intelectual en el extranjero, y afirmó que las disputas deben resolverse a través de diversos canales, como la mediación y el arbitraje.
El experto también celebró las disposiciones que incentivan a los bufetes de abogados a mejorar la eficiencia de sus servicios de propiedad intelectual y apoyan la creación de fondos de resolución de disputas de propiedad intelectual en el extranjero por parte de empresas nacionales.
"Estas medidas ayudarán a nuestros innovadores a reducir el coste de la protección transfronteriza de los derechos de propiedad intelectual", añadió.
Wang Zhenkun, socio de Shanghai YaoWang Law Offices, afirmó que la nueva normativa "acelerará la implantación de las instituciones chinas de servicios legales de propiedad intelectual en todo el mundo, lo que ayudará a las empresas nacionales a integrarse con las normas internacionales de forma más eficaz, así como a fortalecer la influencia de China en la gobernanza global de la propiedad intelectual".
La normativa también contribuirá a la salvaguarda de la seguridad nacional y los intereses de desarrollo, apuntó Wang, ya que establece que si países extranjeros utilizan las disputas de propiedad intelectual como pretexto para restringir o reprimir a China, o para imponer medidas discriminatorias y restrictivas a ciudadanos u organizaciones de China, los departamentos del Gobierno central podrán tomar contramedidas.
"Los servicios de propiedad intelectual relacionados con el extranjero son una de las actividades principales de nuestro bufete", afirmó Wang.
"No solo conocemos a fondo la experiencia técnica y las demandas comerciales de las empresas nacionales, sino que también aprovechamos los recursos de las plataformas de cooperación internacionales para evitar errores estratégicos causados por diferencias culturales o jurídicas", destacó el especialista de Shanghai YaoWang Law Offices.
"Hemos ayudado a empresas chinas de tecnología y manufactura a recopilar pruebas en disputas de patentes y marcas registradas en Europa, proporcionándoles estrategias de litigio", añadió.
"También hemos cooperado con nuestros socios extranjeros para realizar un seguimiento de la legislación local sobre propiedad intelectual en tiempo real, con el fin de ajustar proactivamente los planes de solicitud de propiedad intelectual y reducir los posibles riesgos de disputas para las empresas nacionales que se expanden al extranjero", dijo Wang.
El bufete en el que Liu trabaja como abogado especializado en propiedad intelectual también ha establecido una cooperación duradera y estable con instituciones extranjeras de servicios legales en diversos países y regiones, como Alemania, Francia y Suiza.
"Formulamos planes de cumplimiento para empresas nacionales en áreas como la exportación de tecnología y la transferencia transfronteriza de datos, brindándoles servicios legales", refirió Liu. "De esta manera, pueden evitar infringir los derechos de propiedad intelectual de entidades extranjeras y reducir las pérdidas que podrían sufrir por disputas de propiedad intelectual en el extranjero".
Tanto Liu como Wang sugirieron que China debería intensificar el trabajo en la formación de talentos en materia de propiedad intelectual. Ambos se comprometieron a trabajar con las autoridades para brindar capacitación legal e introducir leyes de propiedad intelectual a empresas que se globalizan, compartiendo experiencias y prácticas mediante estudios de casos.
