CARACAS, 29 ene (Xinhua) -- La comunidad china en Venezuela, autoridades de ambos países y público venezolano en general se congregaron este miércoles bajo el anochecer caraqueño para festejar el Año de la Serpiente y dar la bienvenida al Año Nuevo chino.
Agrupaciones culturales del Instituto Confucio y de la comunidad china en Venezuela ejecutaron una muestra de la danza del dragón y el león. Por su parte, los diablos danzantes de Naiguatá venezolanos, compuestos por 30 bailadores y músicos, consolidaron la alegría de los presentes con su manifestación cultural.
"Deseamos toda la felicidad y toda la buena fortuna tanto para el pueblo chino, para el pueblo de Asia Oriental, como para el pueblo de Venezuela", dijo el canciller venezolano, Yván Gil, quien acudió al evento.
El canciller agradeció a la comunidad china en Venezuela y destacó que, a su juicio, esta "tiene ya varias generaciones en el país y no ha parado de trabajar, no ha parado de crear, de activarse en todas las áreas: industrial, agrícola, comercial, tecnológica y todos los días nos da algo nuevo".
Además, Gil calificó a China como un gran país de paz, "que no es colonizadora, que no es imperio, sino que es bondadosa, trabajadora, gracias a la dirección del Partido Comunista de China".
En tal sentido, aprovechó el festejo de esta noche para ratificar el compromiso del Gobierno venezolano y su presidente, Nicolás Maduro, con la asociación estratégica a toda prueba y todo tiempo entre Venezuela y China, que ambos países desarrollan en distintos sectores de la economía, la sociedad, la geopolítica y la cultura.
Por su parte, el embajador de China en el país sudamericano, Lan Hu, expresó que "la comunidad de los chinos forma una parte muy importante de la gran familia de Venezuela", y agregó que el Año Nuevo Lunar chino se convierte, cada vez más, en una fiesta también venezolana.
A ojos de Lan, las serpientes tienen connotaciones positivas y hermosas en las culturas tanto de China como de Venezuela, al tiempo que expresó sus deseos de que la serpiente, como indica el zodíaco chino, traiga la paz, la armonía y la buena suerte para el desarrollo sostenible de los dos países y pueblos.
La Fiesta de la Primavera, que celebra la llegada del Año Nuevo Lunar chino, no solo es el evento social y cultural más importante de China, sino también una de las mayores expresiones culturales del mundo, inscrita desde el pasado diciembre por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.