BEIJING, 19 dic (Xinhua) -- El proveedor chino de servicios de vida en línea Meituan anunció que ha lanzado su primer servicio de entrega con dron en el extranjero, un paso significativo para aprovechar a nivel global las tecnologías digitales avanzadas y ecológicas del país en materia de economía de baja altitud.
Meituan informó el miércoles que su subsidiaria de servicios de entrega con drones, Keeta Drone, había obtenido una licencia comercial para entregas con drones más allá de la línea de visión (BVLOS, por sus siglas en inglés) de la autoridad de aviación civil de Dubái, y había comenzado a proporcionar entregas rápidas y eficientes de alimentos, medicamentos y otros artículos esenciales en áreas piloto designadas.
Además de llevar su aeronave de desarrollo propio, aeropuerto automatizado y sistema de programación inteligente a Dubái, la compañía ha realizado amplias adaptaciones y modificaciones para abordar los desafíos que plantea el entorno local, como las altas temperaturas, explicó Mao Yinian, vicepresidente de Meituan y presidente de Keeta Drone.
La economía de baja altitud, incluyendo las entregas con drones y los automóviles voladores, ha experimentado un rápido desarrollo en China en los últimos años, ya que muchos gobiernos locales han establecido políticas de apoyo para explorar esta nueva frontera de la actualización del consumo.
Meituan comenzó a desarrollar drones para entregas locales fluidas aire-tierra en 2017 y lanzó en 2021 su primer servicio de entrega comercial en la ciudad de Shenzhen, un nodo tecnológico en el sur de China.
Hasta diciembre de 2024, Keeta Drone operaba 53 rutas en las principales ciudades chinas y había completado más de 400.000 entregas. El servicio ofrece a los clientes una amplia selección de productos y abarca una variedad de ubicaciones, que van desde oficinas, áreas residenciales y bibliotecas hasta lugares turísticos como la Gran Muralla.
Se estima que el tamaño de la economía de baja altitud de China supere los 500.000 millones de yuanes (alrededor de 69.530 millones de dólares) a fines de 2023, y se espera que su escala aumente a dos billones de yuanes para 2030, según la Administración de Aviación Civil de China.
"Esperamos explorar más posibilidades en la economía de baja altitud, llevando tecnologías a los mercados extranjeros, lo que permitirá obtener resultados mutuamente beneficiosos entre las tecnologías de China y más países y regiones", afirmó Mao.