BEIJING, 17 nov (Xinhua) -- Un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China compartió hoy domingo una visión general de la reunión entre los presidentes chino y estadounidense en Lima.
Tras señalar que el presidente chino, Xi Jinping, se reunió con su homólogo estadounidense, Joe Biden, a petición de este último, al margen de la Reunión de Líderes Económicos del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en Lima, Perú, en la tarde del 16 de noviembre, hora local, el vocero subrayó que esta reunión se celebró un año después de la última vez que se reunieron los dos mandatarios.
Las dos partes revisaron la trayectoria de las relaciones entre China y Estados Unidos durante los últimos cuatro años y de ella extrajeron experiencias e inspiraciones. Su conversación fue franca, profunda y constructiva, y se centró en impulsar los diálogos y la cooperación y en gestionar las diferencias de manera adecuada durante el período de transición del Gobierno estadounidense y en las cuestiones regionales e internacionales de interés mutuo, y trazó el rumbo de las relaciones bilaterales, añadió el portavoz.
En los últimos cuatro años, las relaciones entre China y Estados Unidos han experimentado altibajos, pero bajo la dirección de los dos presidentes, ambas partes también han llevado a cabo diálogos y cooperación y los lazos bilaterales se han mantenido estables en general, indicó el funcionario, y agregó que en sus interacciones con el presidente Biden, el presidente Xi compartió plenamente sus puntos de vista sobre cómo las dos partes deben abordar las relaciones bilaterales, los cuales proporcionan orientación estratégica y son importantes para la dirección de los vínculos sino-estadounidenses.
El presidente Xi comparó vívidamente las relaciones entre China y Estados Unidos con una mansión. En 2021, durante la reunión virtual con el presidente Biden, propuso que los dos países deben seguir los principios de respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación de beneficio mutuo, que son la cúpula de la mansión. Durante la reunión de Bali de 2022, hizo énfasis en las cuatro líneas rojas de China sobre la cuestión de Taiwan, el camino y el sistema, la democracia y los derechos humanos y el derecho al desarrollo, que son los cimientos de la mansión. Durante la reunión en San Francisco, en 2023, afirmó que China y Estados Unidos deben desarrollar conjuntamente una percepción correcta, gestionar los desacuerdos de manera efectiva, avanzar en la cooperación de beneficio mutuo, asumir responsabilidades como grandes países y promover los intercambios entre sus ciudadanos, que son los cinco pilares de la mansión, precisó el vocero.
En Lima, el presidente Xi enumeró con perspicacia siete experiencias e inspiraciones que los dos países deben extraer del curso de sus relaciones, a saber, tener una percepción estratégica correcta, hacer que las acciones coincidan con las palabras, tratarse como iguales el uno al otro, no desafiar las líneas rojas ni los principios primordiales, llevar a cabo más diálogos y cooperación, responder a las expectativas de la gente y dar un paso adelante para asumir las responsabilidades de grandes países. Xi destacó que ambos lados deben seguir añadiendo bloques de construcción a la mansión y expresó su disposición a hacer esfuerzos conjuntos con el presidente Biden y con su sucesor para lograr este fin, según el portavoz.
La historia nos enseña que China y Estados Unidos ganan con la cooperación y pierden con la confrontación. El presidente Xi señaló, a partir de su profunda observación, que la Trampa de Tucídides no es una inevitabilidad histórica, que una nueva Guerra Fría no debe librarse ni puede ser ganada, y que contener a China es imprudente, inaceptable y está destinado al fracaso. China y Estados Unidos, como dos países importantes, necesitan tener en cuenta el beneficio de todo el mundo e inyectar mayor certidumbre y energía positiva al turbulento mundo de hoy día, de acuerdo con el portavoz.
El vocero puntualizó que los entendimientos comunes alcanzados en la reunión de Lima son los siguientes: Los dos presidentes reiteraron los siete puntos de entendimiento común sobre los principios rectores de las relaciones sino-estadounidenses, a saber, tratarse con respeto el uno al otro, encontrar una manera de vivir juntos pacíficamente, mantener líneas abiertas de comunicación, prevenir conflictos, defender la Carta de las Naciones Unidas, cooperar en áreas de interés compartido y gestionar de manera responsable los aspectos competitivos de los vínculos. Las dos partes están listas para defender estos principios, continuar estabilizando los lazos bilaterales y garantizar una transición fluida de los mismos.
Ambos mandatarios hablaron positivamente sobre el importante papel de la comunicación estratégica entre China y Estados Unidos, el contacto regular entre los equipos diplomáticos y de seguridad y los mecanismos de diálogo sobre las relaciones entre sus respectivas fuerzas militares, los lazos económicos y comerciales y los asuntos financieros. Acordaron mantener el impulso en la comunicación y fortalecer la coordinación de políticas macroeconómicas. Los dos presidentes revisaron los importantes avances logrados en diálogos y cooperación en materia de la lucha contra el narcotráfico, el cambio climático, la inteligencia artificial y los intercambios entre personas desde su reunión en San Francisco, agregó el portavoz.
Los dos presidentes creen que las dos partes han mantenido un diálogo franco y constructivo sobre la inteligencia artificial (IA). Las dos partes copatrocinaron entre sí sus respectivas resoluciones en la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre la IA. Sobre esta base, los dos mandatarios afirmaron la necesidad de hacer frente a los riesgos de los sistemas de IA, hacer la IA más segura, mejorar la cooperación internacional y promover la IA para el bien y para todos. Los presidentes afirmaron la necesidad de mantener el control humano sobre la decisión de utilizar armas nucleares, y destacaron la necesidad de considerar seriamente los riesgos potenciales y adoptar una actitud prudente y responsable al desarrollar la IA para el dominio militar, dijo el vocero.
"En la reunión, las dos partes no tuvieron miedo de hablar sobre sus diferencias. El presidente Xi dejó absolutamente clara la posición de principios de China en cuanto a varios temas importantes", afirmó.
Sobre la cuestión de Taiwan, el presidente Xi destacó que el principio de "una sola China" y los tres comunicados conjuntos China-Estados Unidos son el fundamento político de las relaciones sino-estadounidenses y deben ser observados. La paz y la estabilidad a través del estrecho de Taiwan y las actividades separatistas de la "independencia de Taiwan" son irreconciliables como el agua y el fuego. Si la parte estadounidense realmente tiene interés en mantener la paz a través del estrecho de Taiwan, es crucial que vea claramente la verdadera naturaleza de Lai Ching-te y las autoridades del PPD en la búsqueda de la "independencia de Taiwan", maneje la cuestión de Taiwan con mayor prudencia, se oponga inequívocamente a la "independencia de Taiwan", y apoye la reunificación pacífica de China.
En relación con la cuestión del Mar Meridional de China, el presidente Xi subrayó que China defiende firmemente su soberanía territorial y sus derechos e intereses marítimos en dicho mar. El diálogo y las consultas entre los Estados interesados es siempre la mejor manera de gestionar las diferencias en el Mar Meridional de China. Estados Unidos no debe involucrarse en disputas bilaterales sobre las islas y arrecifes pertinentes de Nansha Qundao, ni debe apoyar ni instigar acciones provocadoras.
Sobre la represión estadounidense contra el comercio y el desarrollo tecnológico de China, el presidente Xi señaló que el derecho del pueblo chino al desarrollo no debe ser suprimido ni ignorado. Todos los países necesitan salvaguardar su seguridad nacional. Frente a los desafíos, ni el desacoplamiento ni la interrupción de las cadenas de suministro son la solución, y la postura de "patio pequeño con muros altos" no es la que corresponde a un gran país. Estados Unidos no debe exagerar el concepto de seguridad nacional, mucho menos utilizarlo como pretexto para acciones maliciosas orientadas a restringir o contener a otros países.
En cuanto a los supuestos "ciberataques de China", el presidente Xi señaló que no hay evidencia que apoye tan irracional afirmación, y que la propia China es un objetivo de ciberataques internacionales y se opone y combate constantemente todas las formas de ciberataques.
Con respecto a la difamación y la asignación deliberada de culpas a China en asuntos internacionales y regionales por parte de Estados Unidos, el presidente Xi dijo que la posición y las acciones de China en la cuestión de Ucrania siempre han sido claras y justas. China lleva a cabo una diplomacia y una mediación de ida y vuelta para promover conversaciones de paz, hace todo lo posible por la paz y se esfuerza por reducir las tensiones. China no permite que en la península de Corea se registren conflictos ni agitaciones, y no se quedará de brazos cruzados cuando su seguridad estratégica y sus intereses fundamentales se vean amenazados.
El vocero sostuvo que el presidente Xi, en particular, hizo énfasis en que el objetivo de China de una relación estable, saludable y sostenible entre China y Estados Unidos permanece inalterado. Su compromiso con el respeto mutuo, la coexistencia pacífica y la cooperación de ganancias compartidas como principios para el manejo de las relaciones China-Estados Unidos se mantiene sin cambios. Su posición de salvaguardar resueltamente los intereses de China en materia de soberanía, seguridad y desarrollo sigue siendo la misma. Y su deseo de llevar adelante la amistad tradicional entre los pueblos chino y estadounidense no ha cambiado.
"Esto muestra que China está dispuesta a entablar un diálogo, ampliar la cooperación y gestionar las diferencias con el Gobierno entrante de Estados Unidos con el fin de mantener la estabilidad de las relaciones China-Estados Unidos para beneficio de los dos países y del mundo en general", manifestó el portavoz. ■