WASHINGTON, 8 nov (Xinhua) -- El embajador chino en Estados Unidos, Xie Feng, pidió que se mantengan los tres principios de respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación con ganancias compartidas a la hora de tratar los lazos bilaterales entre Beijing y Washington.
Xie pronunció un discurso el jueves a través de una videoconferencia para dirigirse a la cena de recepción del Consejo Empresarial Estados Unidos-China que conmemoraba el 45º aniversario de las relaciones diplomáticas entre los dos países. El acto se celebró en la metrópoli oriental china de Shanghai.
Los tres principios propuestos por el presidente chino, Xi Jinping, a saber, el respeto mutuo, la coexistencia pacífica y la cooperación con ganacias compartidas, resumen la experiencia de las relaciones chino-estadounidenses en las últimas décadas y señalan el camino correcto para que ambos países se lleven bien en la nueva era, dijo el embajador.
Se espera que la parte estadounidense trabaje con China en la misma dirección y que ambos hagan avanzar conjuntamente la relación por una vía estable, sólida y sostenible, agregó.
No hay dos hojas iguales, ni dos países idénticos, según el diplomático, China nunca se convertirá en otro Estados Unidos y que las diferencias deben ser un impulso para los intercambios y el aprendizaje mutuo.
La Tierra es lo suficientemente grande para que China y Estados Unidos se desarrollen respectivamente y prosperen juntos, afirmó Xie.
Considerar a China como un competidor estratégico de primer orden, como el desafío geopolítico de mayor consecuencia y una amenaza creciente es un grave error y solo conduciría a una "profecía autocumplida", subrayó.
La cuestión de Taiwan es la primera y principal línea roja que no debe cruzarse en la relación China-EE. UU. El principio de una sola China y los tres comunicados conjuntos chino-estadounidenses deben respetarse tanto de palabra como de obra, agregó el diplomático.
Ningún desafío podrá frenar el desarrollo de China. Cualquier intento de cercar, contener o suprimir a China sería contraproducente, dijo Xie, añadiendo que nadie debería subestimar la firme voluntad y la fuerte capacidad del pueblo chino para salvaguardar la soberanía nacional, la seguridad y los intereses de desarrollo.