MADRID, 16 feb (Xinhua) -- El Gobierno español asignó 120 millones de euros para investigar por primera vez en el país la geotermia profunda, una energía renovable que aprovecha el calor almacenado a un mínimo de 1.000 metros bajo la superficie terrestre, publicó este viernes el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Del total de las subvenciones, 106,2 millones de euros irán para las Islas Canarias (suroeste, frente a la costa africana) y, dentro del archipiélago, para la isla de La Palma, que vivió en septiembre una gran erupción volcánica que se prolongó durante 85 días, la más larga de su historia.
Debido a su especial naturaleza volcánica, el subsuelo canario posee el mayor recurso geotérmico de media y alta temperatura de todo el territorio español, por lo que podría cubrir gran parte de la demanda eléctrica del archipiélago, detalló la cartera en su página web.
Aunque España cuenta con una estructura geológica propicia para la presencia de este recurso, los elevados costes y los riesgos financieros asociados a esta tecnología de extracción han impedido, hasta el momento, su implantación.
"Los potenciales resultados exitosos darían acceso a los promotores, en una fase posterior, a la explotación de este recurso y a desplegar, por tanto, los primeros desarrollos de geotermia profunda de media y alta temperatura para generación eléctrica o para usos térmicos directos en nuestro país", explicó el ministerio.
La energía geotérmica es una energía limpia, gestionable e inagotable, cuyo aprovechamiento redunda en una menor dependencia del exterior, reduce el consumo de combustibles fósiles y refuerza la seguridad de suministro al proporcionar un flujo constante de energía que no depende de variaciones estacionales.
Mientras la geotermia profunda permite generar electricidad a más de 150 grados, la superficial, que se utiliza básicamente para climatización (calefacción, ventilización y aire acondicionado), maneja temperaturas en torno a 30 grados.
A diferencia de otras energías renovables, como la eólica o la solar, la geotermia no depende de las condiciones climatológicas y, tras la perforación, basta con abrir o cerrar el paso del vapor, por lo que se puede definir como una "energía gestionable".
