BUENOS AIRES, 27 feb (Xinhua) -- Científicos argentinos lograron evidencia genética que revela que la ocupación humana de Sudamérica ocurrió hace más de 18.000 años, informó hoy lunes el Consejo de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet).
El organismo científico estatal explicó que expertas argentinas secuenciaron completamente un conjunto de muestras pertenecientes a linajes nativos del continente y pudieron determinar cuándo existieron las primeras poblaciones en la región.
Además, el estudio dio cuenta del impacto que tuvo sobre aquellos grupos un periodo de cambio climático acontecido hace cerca de 12.000 años.
El Conicet dijo que "el poblamiento de América es el eje de un interesante e incesante debate desde hace décadas, y aún hoy las preguntas sobre cuándo y dónde se establecieron con certeza los primeros grupos humanos permanecen abiertas".
Las hipótesis son varias. Una de ellas el modelo conocido como teoría Clovis, que postula que los asentamientos iniciales tuvieron lugar hace alrededor de 13.000 años con la cultura Clovis en América del Norte; otro modelo, que es el que actualmente reúne mayor evidencia, propone que el ingreso a América se registró hace 18.500 años, pero la llegada a América del Sur se dio muchos miles de años después.
Una tercera vertiente, que cuenta con varios sitios arqueológicos que la refrendan, ubica la llegada de los primeros humanos a Sudamérica hace más de 18.000 años.
Esta última hipótesis acaba de cobrar mayor fuerza gracias a un estudio genético realizado por un equipo de investigación del Instituto Multidisciplinario de Biología Celular de Argentina.
Basado en la tesis doctoral de Paula Paz Sepúlveda, primera autora de la publicación, el estudio construye un árbol filogenético, es decir, un diagrama de relaciones de parentesco, tomando como base las secuencias completas del cromosoma Y, material genético que define exclusivamente al género masculino, de 13 individuos de los que, por estudios anteriores, se sabía que portaban marcas bien típicas de linajes nativos americanos.
Esto se contrastó con cerca de 100 muestras de bases de datos de secuencias provenientes de distintas partes del mundo.
"Las 13 muestras argentinas que utilizamos fueron recolectadas previamente en personas con ancestros aborígenes que voluntariamente participaron de distintos proyectos sobre la historia de las poblaciones urbanas del interior del país", comentó Graciela Bailliet, investigadora del Conicet.
El aporte principal del trabajo es que, gracias a la nueva información que aportaron las secuencias completas, se logró ubicar temporalmente el ingreso de las primeras poblaciones humanas a Sudamérica antes de los 18.000 años y, además, arrojó información sobre cómo fueron las conexiones que se dieron entre los primeros grupos de habitantes.
"Surgen interacciones interesantes de ver, por ejemplo, linajes característicos del Nordeste de nuestro país que están relacionados con muestras de los Andes peruanos y de la región Andina de Bolivia con más de 12.000 años de antigüedad", dijo Paz Sepúlveda.
La investigadora remarcó que "esto permite cuidar una historia de interacción entre nuestros ancestros, presentando nuevos datos que, en algunos casos, todavía no están en los libros de Historia".
Otro aporte del estudio es la evidencia que arroja sobre el impacto que pudo haber tenido en las primeras poblaciones americanas el periodo de cambio climático abrupto, conocido como Younger Dryas, o Dryas Reciente, hace aproximadamente 12.800 años.
Ese evento "fue más estudiado en el hemisferio norte, pero también cuenta con evidencias arqueológicas que sugieren que en el hemisferio sur provocó la extinción y disminución de la megafauna a gran escala, y la disminución y reorganización de las poblaciones humanas", comentó Paz Sepúlveda.