LA PAZ, 10 oct (Xinhua) -- Al cumplirse 40 años de la recuperación de la democracia en Bolivia, el debate político se concentra en mensajes polarizados entre el oficialismo y la oposición en medio de la denuncia del presidente, Luis Arce, sobre los riesgos de desestabilización y la exhortación para cuidar el voto popular.
Arce denunció este lunes intentos de desestabilización desde sectores de la derecha radical y aseguró que su gobierno defenderá el voto de los bolivianos que lo llevó al poder en 2020.
"Estamos seguros que vamos a vencer todo tipo de ataques que se reciben, todo tipo de aventureras que tratan de desestabilizar al gobierno nacional. El pueblo boliviano sabe que nuestro gobierno ha recibido en noviembre de 2020 el apoyo de más del 55 por ciento de votación del pueblo boliviano", aseguró.
Arce habló de los intentos de desestabilización en un acto de entrega de obras en el departamento boliviano de Pando (norte) y en momentos en los que grupos de la oposición política, concentrados en el Comité Interinstitucional de Santa Cruz, alistan un paro indefinido para el 22 de octubre, si el Gobierno no modifica la fecha para la realización del Censo Población y Vivienda en 2023.
El censo, que decidirá la nueva asignación de recursos y la nueva distribución de representación política en el Parlamento, debía efectuarse en noviembre de este año, pero en julio el Gobierno lo postergó para 2024 debido a problemas técnicos.
Sin embargo, este cambio de fecha del censo provocó movilizaciones y paros en varios lugares del país en los últimos meses, con epicentro en Santa Cruz, exhortando que el censo se realice el próximo año y no en 2024 como dispuso el Gobierno.
Arce aseguró que su Gobierno defenderá el voto que lo eligió como presidente con la entrega de obras en diferentes regiones de Bolivia.
"Nosotros vamos a defender ese voto de las bolivianas y bolivianos en las urnas, lo vamos a defender y la mejor manera de defenderlo es entregando obras para el pueblo", enfatizó.
El 10 de octubre de 1982 se puso fin al periodo de las dictaduras en Bolivia, cuando Hernán Siles Suazo juraba como presidente, luego de una seguidilla de gobiernos militares que comenzaron en 1964.
Desde entonces, la Presidencia de Bolivia fue definida en urnas, a través del voto popular en elecciones nacionales.
El expresidente y líder del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales (2006-2019), considera que la democracia "se mantiene fortalecida con la vida orgánica de nuestros movimientos sociales, el aporte intelectual de patriotas profesionales y conciencia patriótica de sectores empresariales".
"El 18 de este mes también recordaremos la segunda recuperación de la democracia, por decisión valiente y consecuente de nuestro pueblo que con su voto al MAS-IPSP y nuestros candidatos, los hermanos Lucho y David, decidió poner fin al gobierno de facto que empezó en noviembre de 2019", publicó Morales en su cuenta de Twitter.
