RIO DE JANEIRO, 30 abr (Xinhua) -- Para Brasil sería "fundamental" realizar intercambios con China para poder tener ciudades inteligentes en el país sudamericano a ejemplo de Shanghai, afirmó el presidente de la Asociación Brasileña de Normas Técnicas (ABNT), Mario William Esper.
Esper respaldó en entrevista con Xinhua las ciudades inteligentes y recomendó políticas públicas en Brasil destinadas a este nuevo concepto de municipio que mejora "la calidad de vida de la población".
"Sería fundamental hacer intercambios con China", dijo Esper, quien puso como ejemplo la ciudad china de Shanghai (este), que desarrolló un sistema de accesibilidad a las calles de tipo aéreo.
"Tú no cruzas la calle, todo es aéreo. La limpieza del río, hay un barco que va limpiando el río diariamente, constantemente, y ves un río que pasa por el centro de la ciudad completamente limpio. El transporte, el horario de salida y llegada, todo funciona con miles de personas moviéndose", explicó.
Para el entrevistado, "China es un buen ejemplo" con ciudades como Shanghai, que han implantado estos conceptos y acciones, tanto en movilidad como en internet, "campos necesarios" para una ciudad inteligente.
"Shanghai es una ciudad grande e inteligente y con una sensibilidad fantástica para ser ciudad inteligente", completó el presidente de la ABNT.
La ABNT es el organismo responsable de la normalización técnica en Brasil, al suministrar lo necesario para el desarrollo tecnológico en el país sudamericano, así como una de las voces que defiende con más firmeza la implantación de las ciudades inteligentes.
Esper recordó que las ciudades inteligentes son las "que están conectadas con la sociedad, ciudades que facilitan la vida del municipio, del usuario, tanto en el transporte como en la conectividad en la era digital, en la accesibilidad, principalmente".
"Lo hacen ahorrando tiempo de transporte y facilitando una mejor calidad de vida a la población", argumentó.
Comentó que en Brasil, la ciudad inteligente es todavía un "asunto privado", con iniciativas de algunos institutos o el Parque Tecnológico de Sao José dos Campos, en Sao Paulo.
"Lamentablemente no tenemos ningún programa consolidado del gobierno de algo que debería ser una política pública", agregó el especialista.
Para poder clasificar una ciudad como inteligente, el presidente de la ABNT explicó que hay que tener una medición y un padrón.
"Precisamente esto es lo que estamos haciendo en la ABNT junto con foros internacionales. Ya tenemos normas mundiales para las ciudades inteligentes, que tienen sus indicadores, cerca de 80, y si consolidamos estos indicadores, se puede consolidar una ciudad como inteligente", comentó.
"El 80 por ciento de los municipios brasileños tienen menos de 60.000 habitantes. En estas ciudades, más del 50 por ciento del transporte se hace a pie, no con transporte colectivo. Por lo tanto, hay una necesidad de definir para estas pequeñas y medias ciudades una política pública de ciudades inteligentes, principalmente en el transporte", señaló.
Citó como ejemplo que hace unos años se hizo un ejercicio muy interesante en Sao Jose dos Campos, en el que tras una reformulación de sus calles en el centro de la ciudad disminuyeron en 70 por ciento los accidentes, ya que no eran adecuadas o estaban llenas de baches.
"Esto es importante para las ciudades, que tengan calzadas adecuadas, accesibilidad adecuada para que las personas puedan transitar sin riesgos de sufrir accidente. Lo que falta son recursos públicos para poder hacer acciones y que las ciudades sean inteligentes", expresó.
"Hay más de 80 indicadores para convertirse en ciudad inteligente. No se alcanzan todos de golpe, por lo que hay que definir las prioridades, y estas prioridades dependen de cada municipio",completó.
Expuso que mientras en unos municipios hay que mejorar las vialidades, en otros se requiere mejor transporte público, es decir, en función de las necesidades.
"Lo que recomiendo es priorizar estas prioridades y adecuarlas a los indicadores de ciudades inteligentes", comentó Esper.
De cara al futuro, el entrevistado se mostró esperanzado de que la llegada a Brasil del internet de quinta generación (5G) ayudará a tener ciudades inteligentes.
"El 5G favorecerá las ciudades inteligentes, principalmente en el desarrollo de aplicaciones para el uso común de la población, como consultas médicas que se pueden agendar desde el teléfono móvil", apuntó.
Mencionó, además, aplicaciones en transporte o comercio, cuya mayor velocidad del internet "facilitará este acceso a todo lo digital".
